Las víctimas se resisten a denunciarla.
Tlaquiltenango.- Aunque no se cuenta con registros previos, la violencia hacia la mujer en este municipio se ha incrementado a lo largo del año, aseguró la psicóloga Emilia Ocampo, quien da terapia en las oficinas de la Procuraduría de la Defensa del Menor y la Familia del DIF municipal.
“Todavía está muy presente lo que yo llamo patología, porque va creciendo y es difícil de erradicar, a pesar de que se hace trabajo continuo con la población, hablándole de los diferentes tipos de violencia”, dijo la especialista.
Deploró que a pesar de que cada vez hay mayor información acerca de que no se debe permitir la violencia intrafamiliar, aún “hay muchísima violencia”.
Dijo que lo que más se da en la población de Tlaquiltenango es la violencia económica, física, sexual y psicológica.
Asimismo, Emilia Ocampo enfatizó que pese a que afecta su vida, a la mujer de este municipio le cuesta trabajo reconocer que está viviendo violencia, pues prácticamente se ha normalizado.
“Hay una codependencia; una sensación de que se necesita a la otra persona, a pesar de que la lastime, no le dé dinero, o incluso la viole”, detalló.
Esta situación es tal, que no permite a las mujeres tomar decisiones. “Hay miedo e inseguridad y a pesar de que han hecho mucho trabajo y pueden salir adelante, no lo pueden ver”, lamentó.
Consideró grave este problema en el municipio, pues hay mujeres que han estado a punto de perder la vida como consecuencia de la violencia que sufren, y es entonces cuando reaccionan y se atreven a denunciar.
De hecho, lamentó que las mujeres no se animen a denunciar, particularmente en las comunidades, donde se quedan calladas, por las creencias de que “ésa es tu cruz” y poco a poco empiezan a perder sus ilusiones y a no creerse capaces de lograr algo.
Mencionó que a la fecha se tienen aproximadamente diez denuncias registradas en lo que va del año, pero hay muchos más casos que no se denuncian.