En una contienda, “el que gana lo gana todo y el que pierde, lo pierde todo”, dice.

Xoxocotla.- El recién nombrado alcalde de Xoxocotla, Abraham Salazar Ángel, dijo que no reconocerá adeudos del gobierno anteriores a su toma de protesta, ocurrida el 11 de julio, por lo que cada quien deberá “asumir su responsabilidad”.

Como se recordará, el 1 de enero de este año comenzó el periodo del nuevo gobierno municipal de ese lugar, pero se presentaron diferentes circunstancias, como el asesinato del primer edil, Benjamín López Palacios, y su secretario, Manuel Alejandro Jiménez Ponciano, que llevó a la inestabilidad política de este municipio indígena. Ello derivó en que la síndica municipal, Silvia Herrera, primero asumiera el cargo de alcaldesa provisional; después lo hizo el suplente, Abraham Salazar; posteriormente el regidor Raúl Leal Montes (en algún momento incluso ambos despachaban como presidentes), y finalmente, mediante tribunales, nuevamente Abraham Salazar, a partir del 11 de julio.

Interrogado acerca de la entrega-recepción de toda esta situación, Salazar Ángel destacó que es caótica, pues no existe ninguna referencia de gobiernos anteriores.

“Es un caos, lo tenemos que platicar, no sé si con gobierno del estado o Contraloría, porque desde Leonel Zeferino (el presidente del trienio anterior) no ha habido entrega-recepción. Allí están los paquetes (de documentos), pero no se ha revisado nada”, explicó.

En cuanto a las deudas generadas durante estos primeros siete meses del año, antes de su toma de posesión, dijo que deberán asumirlas quienes las contrajeron. “Las deudas que cada quien haya asumido, que las solvente”, afirmó.

Enfatizó que no reconocerá ninguna deuda de algo que no firmó, como la renta del edificio para la presidencia municipal donde despachaba el regidor en funciones de presidente, Raúl Leal.

“Jamás me dieron un espacio (en la presidencia); yo atendí en diferentes lugares en el poco tiempo, jamás tuve contacto con nadie del edificio”.

Dijo que en general no se sabe cuánto se debe, tanto de renta como de gastos administrativos, pero no los cubrirá.

En cuanto a los salarios de los trabajadores en ese periodo de inestabilidad, dijo que tampoco se han revisado; sin embargo, anticipó que no reconocerá a ningún trabajador que él no haya contratado.

“En una contienda hay un ganador y un perdedor, y el que pierde, lo pierde todo. Yo debo de estar rodeado de gente que me garantice su confianza. No puedo tener a mi lado a gente que toda la vida me gritó en la cara de traidor, de asesino, de narcotraficante, de lo peor… Yo no puedo confiar en esa gente”.

En cuanto al personal de la administración que encabeza, refirió que cuenta ya con alrededor de 200 trabajadores “y son muchos”.

“El director general de Gobierno nos dijo que nuestro municipio debería contemplar un máximo de 250 trabajadores, por el presupuesto, por lo que tenemos que hacer recortes y ajustes”.

Reveló que cuando asumió la presidencia se encontró a personas de entre 75 y 80 años, que ya no podían hacer nada y no justifican su contratación.

Reconoció que algunos trabajadores podrían demandar, pero aseguró que no existen contratos, ni formato ni nómina, ni nada que lo sustente. Además, “¿qué pago van a exigir, si en cinco meses no hicieron nada? Se dedicaron a denostar, a hacer campaña negativa en contra de mi persona”.

Por otro lado, minimizó una demanda en su contra por presunto desvío de 11 millones de pesos.