“El problema es muy grave, (pero) es invisible. Como muchas cosas que suceden con las mujeres, hay una invisibilidad que se da en el asunto. De la estadística que tenemos de una agrupación sindical de mujeres a nivel nacional, que nos dice que el 70 por ciento de las trabajadoras sufren acoso sexual y en consecuencia, acoso laboral; por esta situación estamos hablando de un gran número de mujeres (afectadas)”, declaró la ponente
Patricia Bedolla Zamora, secretaria técnica de la Comisión de Equidad de Género del Congreso del Estado.
Refirió que aunque aún no hay cifras oficiales sobre el tema, en el estado de Morelos hay más de 600 mil mujeres trabajadoras y el 60 por ciento de ellas son jefas de familia, las cuales, se presume, estarían en este riesgo. “El asunto es grave, es más grave de lo que se nos permite ver; pero es un problema invisibilizado (sic) por la misma circunstancia de que no hay una denuncia, por temor a no perder el trabajo o viceversa, o perdemos el trabajo para no impactar a la familia con una situación de este tipo. Porque también, lamentablemente, a las mujeres siempre se nos cuestiona un acoso sexual, en el sentido de que ‘¿y tú qué hiciste?’ Seguramente (el acoso se dio) porque te vistes así, o porque tú diste el motivo, o te dicen, los hombres llegan hasta donde las mujeres quieren, etc.”
Consideró que esta situación se refleja al interior de las familias. “Hay mujeres que dicen ‘prefiero renunciar a este trabajo y no llevar este problema a mi casa’; y hay mujeres que prefieren quedarse calladas para evitar que sean corridas de su trabajo, dependiendo de sus necesidades, de su circunstancia económica y su historia de vida.”
Consideró necesario establecer políticas públicas, que se deben difundir a través de la Secretaría del Trabajo. “Se deben establecer reglas justamente de convivencia al interior de las empresas; la Secretaría del Trabajo tiene la facultad, en un momento determinado, de sugerir a las empresas los cursos y las capacitaciones que se tienen que dar al interior, y una de ellas, y muy importante, debe de ser la que previene el acoso sexual. No debemos de soslayar que también se puede dar una situación en la que a veces hay varones que no perciben el acoso y consideran que son incluso solamente piropos. Dicen cosas tales como ‘ay, chaparrita’, ‘estás guapísima’, y creen que están halagando, no acosando; pero, cuántas veces un halago reiterativo de éstos nos hace sentir mal, cuando se dice reiteradamente.”
CONCLUSIONES DEL FORO
En un comunicado de prensa, los organizadores dieron a conocer las conclusiones del foro, en el que participaron Patricia Bedolla, secretaria técnica de la Comisión de Equidad de Género del Congreso del Estado; Nadxielli Carranco, integrante del Comité contra el Feminicidio en Morelos; Carlos Navarro, visitador de la Zona Sur de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Morelos, y la periodista Angelina Albarrán, moderados por la diputada local Hortencia Figueroa.
Los ponentes coincidieron en que el tema de hostigamiento y acoso sexual es una práctica cotidiana en los centros de trabajo y que es una conducta delictiva que rara vez se denuncia, permanece en el anonimato, lo que dificulta realizar estudios que permitan conocer, con precisión, la incidencia y dar seguimiento a estos casos, resume el comunicado.
La mayor parte de las víctimas son mujeres, aunque han existido casos en los que el agredido es un hombre; la condición de subordinación laboral genera vulnerabilidad porque en muchos de los casos las trabajadoras son madres solteras y frente a la amenaza de perder el único sustento económico de sus hogares, no se atreven a denunciar a los transgresores.
“Hortencia Figueroa señaló la importancia de que las mujeres conozcamos nuestros derechos y las instancias a las que se puede acudir cuando se enfrenta una situación de acoso; no podemos quedarnos sólo en la indignación. Debemos pasar a la acción, es necesario romper el silencio cómplice; cuando se vive una situación así, debemos denunciar y persistir hasta que haya una sanción. Como sociedad, asumamos la responsabilidad, hagamos conciencia y superemos la omisión, la indolencia que han generado impunidad.”
Durante el foro se conocieron testimonios de mujeres que han sido hostigadas sexualmente en sus centros de trabajo, en particular el caso de un regidor del Ayuntamiento de Yautepec que se encuentra bajo la integración de un procedimiento penal por este delito. La víctima narró las adversidades que ha tenido que enfrentar durante un año que lleva el proceso y en paralelo, la difícil situación que vive porque fue despedida injustamente, recurriendo ante el Tribunal Estatal de Conciliación y Arbitraje, sin que exista aún resolución.
Dentro de las conclusiones del foro, se propuso conformar un Frente de Defensa de Mujeres víctimas de hostigamiento o acoso sexual en el ámbito laboral que atienda a las mujeres y les brinde la orientación adecuada para acudir a las instancias y acompañarlas en los procesos de deban iniciar. Asimismo, se hizo el compromiso desde la Comisión de Trabajo, Previsión y Seguridad Social, y de la Comisión de Equidad de Género del Congreso del Estado, a efecto de generar propuestas legislativas que den respuesta a esta problemática.