En conferencia de prensa realizada la mañana de ayer en esta ciudad, en donde manifestó su pretensión de participar en la contienda interna para la candidatura del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a la gubernatura del estado, Morales Barud afirmó que la falta de empleo suficiente y bien remunerado –particularmente para las mujeres que son jefas de familia y hombres jóvenes– son un reto importante para el próximo gobernador de la entidad, lo mismo que la creciente inseguridad, que “ha afectado la vida y libertad de los morelenses”.
Refirió que los secuestros, la privación ilegal de la libertad, los robos, incluso de cable de cobre hasta de vehículos, son una situación que afecta a la mayoría de la población.
Interrogado acerca de los secuestros que se han dado recientemente en el municipio de Puente de Ixtla y de lo que él mismo ha tenido experiencia en carne propia, Morales Barud opinó que una combinación de factores hace que esto se mantenga desde hace años.
“Hay una combinación de efectos perniciosos para la seguridad; uno es la pobreza y desigualdad, otro más es la impunidad. Es decir, la impunidad se refiere a la falta de capacidad para poder hacer justicia a quienes enfrentan una situación fuera de la ley y que han sido víctimas. Entonces, atacar la impunidad, atacar las causas de la inseguridad como la pobreza y desigualdad, serían una solución, además de mejorar la actuación de los policías. Los policías son muy importantes en la sociedad y en muchas ocasiones también no han sido apoyados, no tan sólo en capacitación sino también en elementos para cumplir adecuadamente su labor y también incentivos para que estén tranquilos con respecto a sus familias en caso de que puedan faltar”, apuntó.
En Puente de Ixtla, prosiguió, hace falta, sin duda, una mayor presencia de cuerpos policiacos federales, estatales y también un fortalecimiento a la capacidad operativa de la Policía Municipal.
“Lo que se requiere es un trabajo de inteligencia policial, más efectivo porque sin inteligencia policial, estableciendo redes y vínculos entre bandas delictivas poco se puede hacer. Lo que requerimos es ser más preventivos que reactivos, porque al ser reactivos no podemos ya resolver la ofensa de un homicidio o un secuestro; lo único que nos queda es hacer justicia, pero lo más importante es evitar que se cometan esos actos delincuenciales.”
Finalmente, destacó que otro hecho es que muchas veces las víctimas no denuncian. “Existe también por un lado la mala reputación de que de nada sirve denunciar porque no se va hacer nada, y hay veces que en las instancias de procuración de justicia, la víctima es doble víctima cuando no es atendida, cuando no es escuchada de manera responsable.”