Agregó que esta situación se deriva de que dentro de la misma familia y la propia sociedad se ha normalizado el consumo de “drogas legales”, como son el alcohol y el tabaco, adicciones que son adquiridas principalmente entre adolescentes; de los factores más comunes destacan que con ello buscan sentirse más “maduros”, por pertenecer a algún grupo social o por imitación o influencia cultural, dijo.
Dávila Sosa señaló que de acuerdo con las últimas estadísticas del 2008 de la Encuesta Nacional de Adicciones, la edad promedio de consumidores de manera inmoderada del alcohol es entre los 14 años, entre hombres y mujeres.
El secretario técnico del Consejo Estatal contra las Adicciones refirió que el consumo inmoderado de bebidas embriagantes trae como consecuencia uno de los factores de mayor índice de accidentes automovilístico, como una de las principales causas de muerte; la violencia, daños a la salud a corto y largo plazo; pérdida de la familia, de la propia casa o auto, entre otras.
Mencionó que habitualmente, después de cinco “copas”, el consumidor de alcohol ingiere hasta intoxicarse o quedar en completo estado de ebriedad, lo que ha colocado a la entidad en el primer lugar del consumo inmoderado de esta “droga legal”, enfatizó Dávila Sosa.
En relación con el consumo del tabaco, Dávila Sosa refirió que, según la última encuesta, el 25 por ciento de la población adolescente y adulta en la entidad consume tabaco regularmente.
“Esto es con el consumo de ‘drogas legales’; sin embargo, sin minimizar la situación, Morelos ocupa el 23 lugar a nivel nacional en el consumo de drogas ilegales”, dijo, para lo cual aseguró que se trabaja en programas contra las adiciones de todo tipo, con la finalidad de concienciar a la población consumidora para reducir el consumo de ellas, acotó.