Como se recordará, el pasado 17 de febrero el personal de la Conagua se presentó en el inmueble y suspendió las áreas de lavado y descarga de agua al río por no cumplir con la norma ni contar con el permiso correspondiente.

Al otro día, se realizó una reunión entre el subsecretario de Gobierno con autoridades de la dependencia federal.

“Asistí a la reunión y hablé con el director jurídico y acordamos levantar la suspensión en ese mismo día, en la inteligencia de que nos otorgaron 90 días para poder cumplir con los requisitos que exige Conagua para poder desahogar las agua en el río Apatlaco. Efectivamente, firmamos un convenio compromiso de obligaciones a nombre del municipio para que en este término de 90 días podamos presentar la documentación que requieren, para así poder obtener el permiso para las descargas de aguas residuales en el río”.

Señaló que son tres los permisos que debe tramitar ante la Conagua.

El primer permiso es en relación a la concesión para la ocupación de terrenos federales y cuya administración compete a la Conagua; el otro permiso es para revisar las obras de infraestructura hidráulica, que sería el entubado, y el último es el permiso de descarga de aguas residuales. Son tres formatos que hay que llenar; cada formato requiere ciertos requisitos que hay que cumplir, hay que complementar. Y en ese sentido, una vez cumplidos esos requisitos, podemos tener acceso otra vez al uso del desagüe de las descargas residuales, dijo.

Reiteró que el rastro ya está operando, pero tienen tres meses para regularizarse y en caso de no cumplir, entonces Conagua procedería a clausurar.

Estimó que se requerirán por lo menos 600 mil pesos para construir una planta de tratamiento de aguas residuales; más el entubamiento y el pago de todos los requisitos que deben cumplir, la cantidad podría alcanzar el millón de pesos.

“Tenemos dos opciones, o tratamos el agua antes de enviarla al río o bien conectamos al drenaje el desagüe de los desechos que se hacen en el rastro”.

Comentó que ante la falta de recursos, el edil someterá a consideración del cabildo la situación para ver de dónde “jalar” los recursos.

“De cualquier manera, se tiene que hacer, porque si no, nos veríamos en apuros para poder operar el rastro municipal cómo se viene operando.”