Antonio Amaro Nava, párroco de la iglesia de San Miguel Arcángel, señaló que del martes a este viernes, de ocho a 18:00 horas, han realizado un jubileo “para pedir a Dios, sobre todo por México; para pedir por la paz, el progreso, por que se realicen unas elecciones tranquilas, transparentes y para que el que gobierne sea elegido por la mayoría en paz”.

Comentó que el jubileo comenzó desde el martes pasado y se extenderá hasta hoy viernes, donde se contará con la exposición del santísimo. “Después de la misa de las ocho de la mañana, hasta la misa de seis, durante todo el día, están personas haciendo oración.”

Señaló que este viernes, terminando la misa, va haber una procesión para pedir por la paz y el progreso de México, así como por la unidad.

Amaro Nava refirió que el jubileo está abierto para todos los creyentes de Tlaltizapán y de municipios aledaños y se está realizando en la parroquia de San Miguel Arcángel.

Dijo no saber si en otros municipios se realiza algo similar, pero “sé que en otros lugares se están ofreciendo misas y oraciones con la misma intención; nosotros no estamos a favor de ningún partido ni ningún candidato en especial; simplemente estamos pidiendo por la paz, el progreso y para que sean justos. Sencillamente es lo que estamos pidiendo, esto no tiene nada que ver con ninguna intención hacia algún partido en especial; no, que sea el que el pueblo decida”.

Reconoció que es una iniciativa de la propia parroquia y mucha gente se ha acercado “y dicen que el único que nos puede iluminar es Dios y es al que recurrimos, básicamente es la iniciativa del jubileo”.

De manera personal, el párroco opinó que las elecciones serán reñidas. “Por eso mismo recurrimos a que Dios nos ilumine.”

Aseguró que la iglesia está invitando a votar porque “es un derecho y una obligación ciudadana, y como creyentes, estamos a favor de cumplir con todas las cuestiones civiles”.

“Creo que todos debemos de encomendarnos a Dios, cada quien su creencia, según su afiliación política, pero todos debemos de pensar en el verdadero progreso, en el bien para todos, que es lo que pedimos en la iglesia; el bien para todos. No vemos cuántos, sino lo que sea lo mejor para la mayoría.”