Las autoridades municipales confirmaron que para solventar las demandas laborales que enfrenta la comuna de administraciones anteriores como son 2003-2006 y 2006-2009, se requiere de un promedio de cuatro millones de pesos, ya que existen laudos superiores al millón y medio de pesos, de los cuales no se ha logrado acuerdo con los demandantes, quienes no acceden a negociaciones.

A estas demandas laborales se sumarán más de 15 que se han presentando durante la administración municipal en curso, donde no se han logrado, por parte del departamento jurídico, acuerdos con los trabajadores que han sido despedidos en el último año de la administración que encabeza el alcalde priista Víctor Tapia Ocampo, y el riesgo de las que puedan acumularse, confirmaron las autoridades locales.

De esta manera, las autoridades locales garantizaron que tras la firma de la renuncia voluntaria, con fecha de 31 de diciembre, por parte de la plantilla laboral actual, que accedió en apoyo a las autoridades municipales, tras una reunión donde se abordó el tema, se evitará heredar un mayor número de demandas laborales a la próxima administración.

El secretario municipal, Cutberto Aguirre Gutiérrez, aseguró que se realizan las gestiones necesarias para lograr liquidar a todo el personal de la comuna al final de la administración, en cumplimiento al acuerdo con los trabajadores.