Pedro Ocampo Álvarez, dirigente de la organización, explicó que a petición del gobierno municipal y por acuerdo con el Gobierno del estado, se retiraron del lugar. “Por más de 25 años no hubo una administración que se preocupara por tener un edificio propio de la organización. Tenemos un terreno, pero nadie pudo invertir. Cuando llegamos hace tres años, lo primero que hicimos fue tener un proyecto de este edificio para tener unas oficinas propias. Desgraciadamente las condiciones del precio de la caña no nos permitieron iniciarlo. Ahora esto nos motiva a buscar recursos, pedir autorización a la asamblea para buscar construir ese edificio lo más pronto posible”, apuntó.
Dijo que las nuevas oficinas, ubicadas en Sanalona 17, son rentadas y pagan seis mil pesos mensuales. “No sabemos cuánto tiempo vamos a estar aquí, dependerá de que tengamos recursos para iniciar la construcción”, aunque estimó por lo menos un año.
Expuso que ya cuentan con un predio, precisamente en la contraesquina donde se ubicaban sus oficinas, sobre el bulevar Lázaro Cárdenas, y también el proyecto que incluiría un edificio de dos pisos y auditorio, y requieren del orden de los cinco a los 5.5 millones de pesos para construir sus nuevas oficinas.
Valer referir que el año pasado el ingenio Emiliano Zapata entregó en donación al ayuntamiento local, el conjunto de oficinas ubicado en el centro de la cabecera, en un lugar conocido como el triángulo, donde se ubicaban las oficinas de la CNPR, así como varias más que también el municipio ha solicitado que sean desalojadas (tales como la de la Asociación de Ganaderos Unidos, trabajadores jubilados y una oficina de telégrafos, así como varias dependencias municipales). Ahí se pretende reedificar el jardín de niños “Narciso Mendoza” que por ampliación del estadio Agustín “Coruco” Díaz, será demolido; además de que ya presenta deficiencias en su estructura por su antigüedad.