Bernardo Vázquez Yáñez, presidente del comisariado ejidal de Tlaquiltenango, mostró el documento enviado al primer mandatario desde el pasado mes de enero de este año.

Le dicen al presidente que no se oponen a la construcción de la autopista, sino a que no sean afectadas tierras productivas. “El compromiso que usted firmó en su campaña presidencial, en su paso por el ejido de Cuautla, para hacer realidad la construcción de la autopista siglo XXI para conectar el Atlántico con el Pacífico, magna obra a la que no sólo no nos oponemos, sino que la exigimos siempre y cuando no destruya parcelas ejidales de alta productividad en nuestro ejido (...)”, señalan en el documento.

Refieren que esas tierras fueron desmontadas y surcadas “a punta de carabina y filo de machete”.

“Señor presidente, los hombres y mujeres del campo morelense creemos en usted, en la congruencia de sus palabras y sus actos. Las tierras de alta productividad son sustento lógico del programa “cruzada nacional contra el hambre”, del que usted ha hecho el principal eje rector de su gobierno (...).

Los naturales de Tlaquiltenango dijimos sí a los movimientos sociales más importantes de México, sin regatearle a la patria vida y familias. Por todo esto decimos sí a la construcción de la autopista siglo XXI, por terrenos de uso común y cerril, y decimos no a la construcción de la autopista por parcelas ejidales de alta productividad. El secretario de comunicaciones y transportes, y el actual gobernador de Morelos lo engañan, señor presidente; ellos pretenden destrozar parcelas ejidales de alta productividad”.

El documento está avalado también por las organizaciones cañeras CNPR y CNC.

El comisariado Bernardo Vázquez Yáñez, agregó que son alrededor de 14 los ejidatarios afectados que siembran caña con parcelas de 25 tareas cada uno, los cuales son hostigados de que vendan porque les dicen que de todos modos la autopista pasará por ahí.

Dijo que antes se le mandó también un oficio al gobernador del estado y éste respondió que deberían ver el asunto con reservas territoriales, pero ahí tampoco les han dado respuesta.

Por su parte, María Concepción Gutiérrez Montes, hija de ejidataria afectada, resaltó que desde el 2006 están pidiendo que la autopista pase por tierras de uso común.

Lamentó que en aquellos años recurrieron al entonces senador Graco Ramírez, quien los apoyó “con todo”, pero ahora como gobernador “dice que la autopista va a pasar”.