La tarde de ayer, un grupo de vecinos se reunieron en el lugar, para manifestar su oposición a los trabajos que la Conagua realiza desde aproximadamente dos semanas con maquinaria pesada, con la que ha amontonado arena y piedras del mismo río para formar un talud a las márgenes del mismo.
Susana Fuentes, vecina del lugar se quejó de que no los tomaron en cuenta para hacer estos trabajos, que calificó de “desastre”, porque “nos van a dejar el río como si fuera una barranca”, pues aseguró que con estos trabajos, ya prácticamente no hay agua en esa parte, e incluso, desaparecieron una poza.
“El agua se está ‘hundiendo’, y estamos exigiendo que nos liberen esa poza, que es el hábitat de los peces; queremos que paren la obra y nos dejen nuestro río como estaba”.
Reconoció que les informaron que ese lugar fue declarado zona de desastre y pretenden hacer “como un muro de contención del agua”, para que cuando crezca el río, no vuelva a pasar lo mismo, pero consideró que cada año el río crece y “no pasa nada”.
Por su parte, Álvaro León Ambriz, jefe de departamento de la Dirección de Infraestructura Hidroagrícola de la Conagua, explicó que desde el mes de septiembre del 2013, se tuvo el problema de avenidas extraordinarias en el río Amacuzac.
“Desde entonces se empezaron a hacer recorridos en las zonas más afectadas, empezando en Amacuzac y terminando en Jojutla. (Esta zona) se metió dentro del programa de declaratoria del Fonden (Fondo de Desastres Naturales) para iniciar los trabajos de limpia y desazolve del río en las partes afectadas”.
Precisó que se consideran dos etapas: “En la primera, se hará limpia y desazolve del río para darle área hidráulica, es decir, darle ampliación para que en tiempo de las avenidas, tenga espacio para conducirlas; en la segunda etapa, se protegerá el hombro del río con gaviones, tapete o enrocamiento”.
Señaló que estas actividades se realizarían a lo largo de 30 kilómetros del río desde Huajintlán en Amacuzac, hasta Xicatlacotla, en Tlaquiltenango, de lo cual llevan un 20 por ciento de avance en los trabajos, que tienen que estar listos antes de la próxima temporada de lluvias.
Negó que estuvieran destruyendo el hábitat de los peces, pues siempre se hacen estudios previos y que antes de iniciar cualquier obra, establecen contacto con las autoridades, en este caso, con el municipio, para explicar de qué se tratan.
Dijo que platicarían con los inconformes para atender sus reclamos y su propuesta de que se le construya una represa para subir los niveles del agua durante el estiaje, en el lugar conocido como “balseadero”, ya que ocupan el lugar como balneario.