Entrevistado durante la visita que realizó ayer a este lugar, para supervisar una jornada médica para los obreros y también para informar el avance del trámite de la jubilación de ex trabajadores, el líder nacional afirmó que la baja en el precio del azúcar (alrededor del 30 por ciento) está ocasionando una crisis en el sector.

Consideró que con el precio “tan devaluado” del kilogramo de azúcar, es natural que haya afectaciones tanto a los industriales, como a los cañeros y hasta los obreros, e incluso calificó esta situación como “la peor crisis de la historia”.

Dijo que en este momento no hay amenaza de recortes de personal en los ingenios, sin embargo, deben tomarse previsiones y diversificar la industria para no llegar a ello. “No dudo que de no tomarse las medidas que se requieren, primero, para que no seamos recurrentes de crisis y se conduzca la industria hacia una industria más rentable, sería una desgracia. La industria azucarera mexicana tiene que hacer lo que hacen ya las demás industrias del mundo: ser industrias más integradas, es decir, ya participar en temas como la cogeneración (de energía eléctrica), como la producción de biocombustibles, que eso haría que la industria sea más rentable. Así como tiene futuro promisorio, también sería una desgracia si no se toman las medidas puntuales que se requieren”.

Dijo que de parte de los trabajadores se están realizando cambios para que sean más productivos, combatiendo las adicciones, reduciendo el ausentismo y capacitándolos. “Desde el año 2008, movilizamos el contrato de la ley de la industria, en donde ya tocamos los temas de la flexibilización, de la multifuncionalidad, de un escalafón alterno, de combatir adicciones, de integrar a la familia, de bajar ausentismos, de bajar accidentabilidad, en eso venimos trabajando ya hace varios años”.

Refirió que actualmente el ingenio “Primavera”, en Sinaloa, está cerrado por falta de materia prima, ya que allá el campo es competitivo y con el valor que actualmente tiene la caña de azúcar, no compite con otros cultivos. Fuera de ello, todos los demás sí están funcionando. “Todos están haciendo la segunda mejor zafra de la historia, lo cual quiere decir que dentro de lo malo, pues también hay cosas recuperables”.