Lo anterior, ante la evaluación de daños estructurales de la escuela, tras el temblor registrado en semanas pasadas, donde fue el único plantel del municipio que presentó daños estructurales debido al tipo de construcción y por su tiempo de vida útil.
Los padres de familia, docentes y directivos de la escuela esperaban la visita de autoridades del gobierno del estado con el objetivo de conocer las condiciones, sin embargo no llegaron.
“Esta escuela tiene más de 40 años. Fue hecha a base de estructura, no cuenta con castillos, los techos son prefabricados, están construidos en terreno de barro y en cada temblor se agrietan y existe el riesgo que se pudiera caer la estructura de los 13 salones que albergan alrededor de 425 niños”, explicaron maestros del lugar.
Agregaron que del mismo modo, el gobierno anterior se comprometió a construir seis aulas, pero únicamente construyó dos, las cuales no están en condiciones para ser utilizadas. “Hizo dos aulas en lo que era la cancha de usos múltiples que está techada, nos redujeron espacio de la cancha, nos afectaron la techumbre y finalmente los salones no han sido utilizados desde hace dos años porque se registran filtraciones severas en la temporada de lluvias”, explicaron.
En su momento –aseguraron- se le hizo saber al gobierno del estado la situación y se solicitó que se realizara una investigación, para saber dónde quedaron las seis aulas que se habían programado para esta escuela, pero no han respondido.
Los padres de familia y docentes solicitan al Gobierno de la Nueva Visión que esta escuela se derrumbe y se construya nuevamente en su totalidad, con infraestructura segura y digna para los niños.
Mencionaron que los sanitarios están en muy mal estado y representan un foco de infección para los niños, además de que no se hay sanitarios para docentes.
"Queremos que este gobierno se comprometa a atender las necesidades de infraestructura para garantizar la integridad física de los estudiantes", reiteraron padres de familia.