Durante la apertura de la “Campaña Nacional de Salud Bucal” realizada ayer en este municipio -y que terminará el 23 de mayo-, Patricia Mora González, directora general de los Servicios de Salud de Morelos (SSM), destacó que los dientes no sólo dan la primera imagen cuando sonreímos, sino que también son importantes para poder hablar, por lo que es necesario atenderlos para contar con una salud integral.
Aseveró que las enfermedades dentales de mayor impacto son la caries y la enfermedad periodontal, el sarro que se acumula en los dientes, que los odontólogos llaman placa dentobacteriana. Resaltó que estas enfermedades son un problema de salud pública, pues nueve de cada 10 personas las padecen.
“Según reportes, hasta el 35 por ciento de los estudiantes de primaria y una cuarta parte de los de secundaria, nunca han ido con un odontólogo y no lo hacen porque no identifican que la salud bucal es importante; el 90 por ciento de la población acude cuando ya hay molestia, dolor e incluso pueden perder la pieza. Es importante acudir al dentista por lo menos una vez al año, desde la niñez”.
Afirmó que los dientes se deben cuidar desde que aparecen, aproximadamente a los seis meses de edad. Algunos padres no le hacen caso a la primera dentición, porque piensan que se van a caer y no hay problema, pero los factores preventivos de las caries se deben hacer en esta etapa.
Sostuvo que el 50 por ciento de los niños de alrededor de seis años de edad, ya padecen algún tipo de caries y cuando llegan a los 19 años de edad, nueve de cada 10 ya la padecen. “En promedio, (los niños) al menos tres dientes ya los tienen lesionados y esta cantidad puede aumentar a más de ocho, alrededor de los 20 años, por eso importante acudir con el dentista”.
Hizo énfasis en que en esta “Primera Campaña Nacional de Salud Bucal” se realizarán actividades preventivas y curativas de manera gratuita, pero también resaltó que los hábitos higiénicos y dietéticos son factores importantes para prevenir la caries. Se deben consumir frutas y verduras, evitar los llamados alimentos “chatarra”, tomar agua y reducir la ingesta de refrescos que, además, genera obesidad.