El titular de la dependencia, Pedro Reyes Salgado, entrevistado al término de la comparecencia que tuvo el día de ayer con el Consejo Consultivo Ciudadano, destacó que no existe conciencia entre la población para pagar su servicio de agua.
“Tenemos un rezago importante, de alrededor del 50 por ciento, de los usuarios que no van al corriente con su pago. En dinero son casi nueve millones de pesos, tan sólo de la base, más aparte recargos y gastos de cobranza que nos lleva a casi 16-17 millones de pesos que tenemos en el limbo, porque no podemos disponer de ellos para el pago de muchos compromisos de parte del organismo operador”.
Señaló que los recursos recabados sirven para la operación de los 18 pozos que tienen a su cargo, pero además, para el pago mensual, de aproximadamente medio millón de pesos del consumo de energía eléctrica; de 60 a 80 mil pesos mensuales para el pago de insumos de cloración y la nómina del personal sindicalizado de base y de confianza. “Es de casi un millón de pesos mensual la operación del organismo operador”.
En especial resaltó que de entre los meses de mayo a octubre, hay una baja natural en la recaudación, lo que los lleva a una situación crítica. “El pasado mes de junio tuvimos un mes muy difícil, porque pues con mucho trabajo logramos pagar los servicios de energía eléctrica de los pozos para evitar corte. En dos ocasiones se nos adelantó el corte antes que el pago y tuvimos afectaciones en algunas localidades”.
Comentó que de acuerdo con una tabla comparativa, el pago mensual del agua en Jojutla equivale a menos de lo que valen tres refrescos de tres litros. “Tres litros valen 75 pesos, y la cuota fija del servicio en Jojutla es de 75-80 pesos. Los usuarios se gastan más en otras cosas, que no son tan esenciales como el agua”.
Dijo también que no ha habido incremento en la tarifa, para que la gente acuda a pagar, pero ni así lo hacen. “El agua es gratis en la naturaleza pero que nos cuesta mucho llevarla hasta sus casas”.
Entre las causas del no pago, expuso que el argumento principal de los usuarios es la falta de ingresos, pero además, el organismo no cuenta con la capacidad humana de hacer los cortes de manera inmediata o también tiene limitaciones marcadas en la ley. “Eso nos ha llevado pues a la tolerancia de la morosidad que nos ha llevado pues a situaciones tan críticas como las que actualmente estamos viviendo”.
Finalmente, observó que en las nuevas mil 700 tomas que se instalaron en el primer cuadro de la ciudad, incluida la colonia Zapata, se incluyó ya una nueva válvula limitadora, que no son fáciles de manipular y con las que se cortará el agua en caso de que no se pague el servicio.