El dirigente de la organización, Aristeo Rodríguez Barrera, reveló que el año pasado, les informaron que el laboratorio, que originalmente se iba a construir en Zacatepec, se instalaría en dicha universidad, ubicada en Jiutepec, con una inversión de 30 millones de pesos.
“Le dieron 30 millones de pesos a una universidad y a nosotros nos quitaron un laboratorio químico de suelos y lo pusieron ahí, con la finalidad de apoyarla con ese recurso. Se llevaron ese laboratorio y a la fecha ni siquiera está certificado. Debe de tener un especialista de suelos, un ingeniero entomólogo que sepa cuáles son las plagas, enfermedades y bacterias que tiene el suelo. No hemos (los cañeros) llevado ninguna muestra de suelo a ese laboratorio porque no vamos a ir hasta Jiutepec, porque quedaron que ese laboratorio iba a estar en Zacatepec”.
Reconocieron que hace un año, que se inauguró, los productores “no dijeron nada”. “Queríamos participar, donde quiera que lo pongan íbamos a estar, no hay problema. Pero no es dar atole con el dedo”.
Explicó que en principio se hizo el proyecto ejecutivo para construir el laboratorio en Zacatepec y desde aquí para darles servicio a todos los productores que lo requirieran. Se instalaría en casi 2.5 hectáreas en ese municipio, en el lugar conocido como “la báscula”.
“Pero nos dijeron que no, que se iba a construir en la Upemor y se hizo ahí. Nos dijeron que era el laboratorio de suelos y de entomología, pero no está certificado, sólo pueden determinar textura del suelo y materia orgánica”.
Aseguró que instalar el laboratorio en esa universidad fue el pretexto para destinarle 30 millones de pesos en total, porque si no, no había manera de cómo entregarles ese dinero.
“Fue una decisión de ellos por manejar políticamente otras situaciones económicas, pero a nosotros no nos benefició”.
Apuntó que en el caso de los productores de caña, cada cuatro años deben sacar muestras de suelo para monitorear las condiciones del campo, no sólo de Zacatepec, sino de Atencingo y Casasano. “Ni siquiera se ha promocionado ese laboratorio y no le ha dado servicio al campo y a todos los campesinos les hace falta para saber qué tipo de suelos tenemos y qué tipo de fertilizantes usar. Mientras no haya especialistas, nunca lo sabremos aunque mandemos las muestras de suelo”.