A unos días de haberse celebrado el Día del Niño, el funcionario reconoció que sí existen niños y niñas que viven en condición de abandono o maltrato, con pocas posibilidades de resolver al corto plazo.
“La problemática que hemos estado sufriendo con los niños, no creo que podamos llegar a erradicarla, todo esto por la educación a la que nos enfrentamos dentro de la familia. Es más que nada violencia hacia los menores, violencia familiar, que es el primero de los muchos problemas que contamos aquí, y el otro es el abandono social de los menores, dentro de la familia”.
Refirió que de enero a la fecha se tienen contabilizadas 120 denuncias de maltrato, violencia familiar, abandono, u omisión de cuidados, la mayoría anónimas, de las cuales, únicamente se han confirmado 20. “Lo que hacemos es una visita domiciliaria con trabajo social, para recabar información con vecinos, con familiares y ver la situación del menor dentro del hogar”.
Dijo que cuentan con el área de psicología, área social y trabajo jurídico para apoyar a los niños e incluso, un refugio donde albergarlos mientras resuelven su situación. “El DIF estatal maneja tres albergues, dos de ellos son para menores; dependiendo de la edad que tengan, es al albergue donde ingresan los menores”.
Expuso que este año, el municipio ha ingresado tres menores al albergue, pero cuando asumieron la administración, fueron muchos más. “El primer año fue el año que más afluencia tuvimos con el ingreso de menores al albergue, fueron 18 menores por maltrato físico y abandono, y dos menores por violencia”.
Las principales causas que derivan en estos problemas son la desintegración familiar y la falta de recursos económicos. “La separación de los padres y los problemas económicos, son los que los conllevan a poder generar este tipo de maltrato o abandono hacia los menores”.
Comentó que de acuerdo con las estadísticas, niñas y niñas son maltratados por igual, de edades entre los seis y 12 años.
“Las comunidades donde desafortunadamente más tenemos este problema, es el corredor que va desde la Altavista hasta Ricardo Soto y la comunidad de Tlatenchi, por las condiciones económicas que se viven ahí, y por el mismo ambiente social que conllevan”.
El funcionario aclaró que hasta este momento no se ha detectado en el municipio trata de personas ni explotación de menores en ámbitos de trabajo, sexual, o alguna otra índole. Tampoco se han registrado problemas de sustracción de menores, aunque eso no significa que no existan. “Me he enterado de que directamente a la procuraduría sí les han llegado este tipo de denuncias.
Finalmente, dijo que para prevenir y erradicar el maltrato infantil, se están llevando a cabo pláticas en las escuelas, principalmente en las primarias.