El secretario general del sindicato único de trabajadores al servicio del ayuntamiento de Tlaquiltenango, Carlos Leyva Salgado, dijo que actualmente la situación está en un proceso legal y por ello no han podido reponer a los trabajadores en su trabajo. “Estamos esperando que se le niegue el amparo al que recurrió el gobierno, para poder ya sentarnos a la negociación”.
Dijo que a principios del 2013, el edil Mauricio Rodríguez González despidió a este grupo de sindicalizados, presuntamente por exceso de personal y falta de presupuesto, pero el sindicato sospecha que fue por razones políticas.
“Procedimos entonces como lo marca la ley, pusimos la demanda. Hace cinco meses ya nos dieron, dictaron laudo a favor de los trabajadores, de que se tienen que reinstalar, aunque con algunas prestaciones que no venían del todo, pero finalmente tuvimos que acudir también al amparo porque para nosotros había algunas prestaciones que no se les reconocían como tal. También nosotros tuvimos que ir al amparo, igual ellos, y estamos en la espera de que se les niegue el amparo, para que nosotros podamos sentarnos a negociar”.
Estamos solicitando, prosiguió, todo lo que por derecho les corresponde, como marca la ley, son como dos o tres millones de pesos, o tantito más. Sin embargo, como somos de aquí de Tlaquiltenango, estamos en la mejor disposición de llegar a un acuerdo, estamos en la mejor disposición de sentarnos y resolverlo de la mejor manera, y que el pueblo sea menos afectado, que no se pague tanto dinero por este laudo.
Consideró que de un momento a otro se pueden resolver los amparos para terminar con este asunto.
“Yo creo que de un momento a otro tendrá que dictar la autoridad laboral el amparo, negarles el amparo (al gobierno) para seguir el proceso, y obligar al ayuntamiento a reinstalarlos. En ese inter, nos tendremos que sentar y negociar de la mejor manera”.