Jojutla.- Las cuatro alumnas de la Escuela de Estudios Superiores de Jojutla (EESJ, antes Instituto Profesional de la Región Sur) de la carrera de Derecho, que fallecieron hace dos años en un accidente carretero, fueron recordadas ayer en una sesión solemne de consejo universitario in memoriam.
Norma Alicia Zenil Rodríguez, Abigail Morales Puente, Yazmín Brisamar Díaz Mejía y Mónica Itzel Bravo López estuvieron nuevamente presentes en el plantel y sus familiares recibieron un testimonio de constancia de estudios post mortem y se develó una obra en su memoria.
Con la presencia del rector Alejandro Vera Jiménez, la ceremonia se desarrolló en la explanada de la escuela, a la que asistieron tanto la comunidad universitaria, como familiares y amigos de las estudiantes fallecidas.
Silvia Cartujano Escobar, directora de la EESJ, pidió un minuto de silencio para honrar la memoria de Norma Alicia, Abigail, Yazmín y Mónica, y dijo que el olvido no se hizo presente, porque familiares, maestros y amigos tienen presentes sus cualidades.
Por su parte, el rector, a nombre del consejo universitario, manifestó su solidaridad con quienes sufren con su ausencia.
“Desde un punto de vista racional, el hecho de la muerte puede ser explicado como algo natural; desde un punto de vista más sentimental, es muy difícil aceptar la pérdida de un ser querido”, dijo.
Añadió que “es muy difícil aceptar la pérdida de un ser querido, decirle adiós a un ser querido que perdimos de manera inesperada, producto de circunstancias que pudieron ser previstas y evitadas”.
A nombre de padres y familiares de las estudiantes fallecidas, Santiago Salvador Bravo Rodríguez, expresó: "El dolor nos ha hecho más fuertes; la traición, más inteligentes; la desilusión, más hábiles y cada experiencia, más sabios”.
Dijo que prefería no recordar el día trágico de hace dos años, sino mejor hacer una reflexión para combatir la impunidad, buscar la dignidad humana, trazar una ruta en búsqueda de la verdad y la justicia, y que seamos responsables de nuestro puesto y de nuestros actos.
“Las investigaciones ministeriales pueden ser manipulables y tendenciosas, pero no cesaremos en buscar la justicia”, resaltó.
Cada una de las familias de las jóvenes fallecidas, recibieron un testimonio de constancia de estudios post mortem y posteriormente se develó el memorial en su recuerdo.
Bravo Rodríguez explicó que se trata de una obra arquitectónica con cuatro monolitos, basados en el cosmos de la vida, cada uno con el nombre de cada estudiante, sostenidas por cinco elementos.
Se hizo una guardia y al final cuatro globos blancos se dejaron ir al cielo.
Entrevistado al término de la ceremonia, el rector reconoció que aún no termina el proceso de indemnización de parte de la empresa privada, pero aseguró que la universidad acompaña a las familias en este trámite y se asumirán los costos necesarios.
“Falta que se haga justicia, que no se admitan más recursos poco éticos a los abogados de la empresa (aseguradora), para no pagar las indemnizaciones. Los familiares no están buscando el dinero, sino que se aplique la justicia conforme a la ley”.
Es menester señalar que el 10 de abril de 2014, un autobús en el que viajaban más de 30 estudiantes de la carrera de Derecho, del entonces Instituto Profesional de la Región Sur de Morelos (IPRES) que había realizado una visita académica al Estado de México, volcó y cayó a un barranco de aproximadamente 40 metros de profundidad, a la altura del kilómetro 60 de la carretera que comunica a las Grutas de Cacahuamilpa en Guerrero, con el municipio mexiquense de Ixtapa de la Sal. Como resultado, cuatro alumnas fallecieron y hubo decenas de heridos, algunos con secuelas hoy día.