Zona sur.- A pesar de la petición de un grupo de productores de caña a la empresa Beta San Miguel, propietaria del ingenio Emiliano Zapata de Zacatepec, de que pague directamente a la institución las cuotas del Seguro Social, por ley se seguirá pagando a las uniones cañeras, aunque podrían llegar a un acuerdo, aseveró Ramiro Ochoa Zavala, gerente de la empresa azucarera.
A finales de septiembre este año, productores de caña de Tlaquiltenango aseguraron que en las organizaciones cañeras -tanto la de la Confederación Nacional Campesina, como la de la Productores Rurales- tenían un adeudo millonario con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), lo que afectaba las prestaciones que recibían de esa institución, cuando a ellos sí les descontaban las cuotas.
Por ello, según declararon entonces Esteban Calderón Beto y Rogelio Bautista, un grupo de cañeros de ese lugar envío un documento a la empresa Beta San Miguel, para que ya no haga la entrega del dinero de las cuotas a las organizaciones cañeras, sino los entregue directamente al IMSS.
Al respecto, el gerente del ingenio, en entrevista, comentó que la ley establece que los ingenios deben de entregar el recurso a las agrupaciones cañeras, por lo tanto continuarán así. “El contrato de la caña es con el ingenio, pero luego se afilian a una agrupación y esa agrupación se hace responsable de darlos de alta ante el seguro social”.
Sin embargo, reconoció que en algunas oportunidades sí lo han pagado de manera directa, de acuerdo con ellos, y en algunas otras, se les ha entregado a las agrupaciones.
“La ley establece que si se tuviera un acuerdo local, pudiera ser que pudiera caminar del otro modo, pero vuelvo insistir, en ocasiones se ha hecho, se ha pagado directo del ingenio al seguro un cheque a nombre del IMSS, sin mayor problema”.
El directivo negó que la empresa tenga adeudos con las organizaciones cañeras por este concepto. De la reciente toma de instalaciones que le hicieron cañeros cenecistas –en septiembre pasado- por varios días, precisamente por supuesta falta de pago de cuotas, comentó que “a lo mejor las cosas no eran tanto de aquí (de Zacatepec), sino mezclaron temas de varios ingenios (del país)”.
Aceptó que ese plantón, que duró varios días, sí afectó la reparación de la fábrica y les costó dinero.
“Es una semana de atraso y es una semana de costo de gratis, porque se le estuvo pagando a los señores obreros. No tengo los números en la memoria (del impacto económico para la fábrica)”.