Tlaquiltenango.- A pesar de que el edil de este lugar Enrique Alonso Plascencia, la consideró “inflada (en costo)” e “inadecuada”, este mes se reinició la construcción de la techumbre de la plaza cívica de esta localidad, con algunas modificaciones en el proyecto.
Gestionada por la diputada federal Rosalina Mazari, a un costo de dos millones de pesos, la obra se inició en julio de este año, pero el mismo mes el Ayuntamiento suspendió la obra, argumentando que no habían solicitado permiso a la comuna.
Además, el edil consideró que la obra estaba inflada en más de 230% en su costo, no era funcional y no armonizaba con la remodelación del primer cuadro que ya se había planeado.
Desde ese mes, la obra quedó interrumpida hasta el inicio de éste, en el que se reanudó.
En entrevista el director de obras públicas de la comuna, Luis García Meneses, confirmó que la semana anterior se reiniciaron los trabajos de construcción.
Dijo que finalmente se aceptó la propuesta original de arco techo, con algunas modificaciones, que se complementarán con el proyecto de imagen urbana.
“Ellos traían los arcos con cantera de Tilza, y se modificó con arcos de muros encalados, como es el emblema de Tlaquiltenango. Se va a manejar un tipo de arco para toda la arquitectura, de un mismo tipo, un arco de piedra negra con piedra blanca, simulando asentados con cal viva”.
Reconoció que también se debía obtener la aprobación del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), pero eso ya será responsabilidad del gobierno del estado, ya que ellos son los que envían los proyectos para su validación.
Refirió que la techumbre está programada para terminarse en 60 días, a partir del primero de noviembre, por lo que se espera que pueda estar lista a finales de este año.
Comentó que a la par de esa obra, también se realizará la de imagen urbana, con un costo de diez millones de pesos.
“La imagen urbana consiste en que desde donde está el seguro social, hasta donde está el cruce con la calle Juan Aldama, se realizarán seis partidas principales: la iluminación, con un tipo de luminaria tipo mil 900; la construcción de todos los andadores, un reencarpetamiento, la modificación en la parte de atrás del kiosco y la remodelación en todas las fachadas principales de este tramo”.
Aseguró que para los vecinos no tendrá costo alguno, más que el cambio de logotipo de los comercios, que tendrían que instalar ahora uno tipo plateado o como se los marca la normatividad del INAH, que incluso ya validó todo el proyecto”.
Añadió que se utilizarán colores ocre y las banquetas serán de concreto estampado rojo óxido.
De hecho los trabajos ya iniciaron y se espera que terminen en tres meses, antes de la feria de la Candelaria, el 2 de febrero.
El funcionario afirmó que esta obra fue consensuada con la ciudadanía, para ello se hicieron cerca de tres mil encuestas.