La gran mayoría de las personas, cuando piensan en la Riviera Maya, se imaginan playas de arenas blancas y aguas turquesa, sin embargo, déjenme decirles que eso es solo el principio del paraíso pues su mayor tesoro ni siquiera es de agua salada.
Entre las maravillas naturales del mundo maya están bien resguardadas algunas lagunas que son dignas de admiración por su indescriptible belleza.
Como les conté, recientemente tuve la fortuna de poder invertir en una propiedad a las afueras de Tulum, cercana a lo que será el nuevo aeropuerto internacional. Una de las ventajas de haber comprado esta propiedad es que su ubicación es privilegiada no sólo porque estará a escasos 15 minutos del aeropuerto y de una estación del Tren Maya, sino porque tiene a menos de 10 minutos tres cenotes impresionantes y lo mejor: está a 15 minutos de la Laguna de Kaan Luum, un lugar que no le pide nada a los paisajes más hermosos del mundo.
Se trata de una laguna cuya particularidad es que en su parte central tiene un cenote ¡de 85 metros de profundidad! Tal como lo leen. De hecho, en ese cenote solo se puede nadar si se cuenta con conocimiento de buceo con tanque, pues no se permite el nado sin equipo profesional. Sin embargo, alrededor del cenote, la laguna es una preciosa alberca natural de diversos tonos de turquesa en la que puedes nadar sin preocupaciones.
El acceso a este paraíso natural tiene un costo de 200 pesos para turistas nacionales y 300 para extranjeros, puedes llevar una hielera con tu comida y bebidas refrescantes (no alcohólicas) y te cobrarán solo 50 pesos por ingresarla. Es importante considerar llevar picnic porque no venden nada de comida más que cocos y botanas en la laguna.
También está prohibido entrar a nadar con bloqueador solar, desodorante, crema o perfume, esto porque contaminaría el agua y afectaría a la flora y fauna acuática. Son muy estrictos con esto y me dio mucho gusto ver eso porque realmente quieren proteger el ecosistema. Esta laguna es parte de un área natural protegida, que es la Reserva de la Biósfera de Sian Kaan.
A 60 km de Tulum está Punta Laguna, un pequeño paraíso. Esta reserva ecológica es un tesoro de la naturaleza, pues nada de ella ha sido modificada. Una comunidad de mayas lleva años preservando este paisaje y gracias a ello podrás ver especies de animales únicas como son el mono araña o el mono saraguato.
Cerca de Tulum también está Nopalitos, que tiene un club de playa donde puedes realizar actividades acuáticas y hasta jugar tenis.
Rumbo a Playa del Carmen, en el poblado de Akumal están la laguna Yalku, cuyas aguas dulces convergen con las aguas saladas del mar, lo que le permite tener una ligera corriente que te dejará recorrerla sin mucho esfuerzo. Sus aguas son cristalinas en tonos verdes diversos que te permiten ver a sus peces multicolores. Esta laguna tiene más infraestructura y cuenta con estacionamiento, baños, regaderas y renta de equipo de snorkeling.
Más al sur, en lo que ya se conoce como Costa Maya, está la Laguna Xulha, que está al sur de Bacalar. Ahí encontrarás rápidos que podrás conocer en kayak. En la misma zona encontrarás la Laguna Milagros, que está a tan solo 15 kilómetros antes de llegar a Chetumal, la capital del estado. Es uno de los lugares favoritos de los lugareños que pasan días familiares ahí. Puedes acampar, hacer kayak y hasta hospedarte en alguna de sus cabañas.
Ahora ya lo sabes, si quieres nadar en hermosas aguas dulces, Quintana Roo también tiene muchas que te dejarán sin aliento por su increíble belleza.