Eso es una realidad que sale a colación por el anuncio de la obligatoriedad que tienen los profesionales de la enseñanza a someterse a exámenes.
Sobre aviso no hay engaño y no podrán alegar desconocimiento si es que incumplen con esa responsabilidad.
Parte de los problemas sociales de la entidad incluye las protestas del magisterio por los citados despidos.
Éste año podrían ahorrárselas si simplemente acuden y llena el requisito que se estableció desde hace varios años con carácter de obligatorio.