La división en el Congreso ha tomado un nuevo rumbo, al atribuirse uno de ellos conductas que van contra la legalidad, como ocurrió la noche del sábado donde sesionaron brevemente pero sin respetarlas reglas del Poder Legislativo.
El enfrentamiento que un grupo de diputados sostiene no contra sus homólogos, sino contra el Poder Ejecutivo, amenaza con alterar la operatividad de las instituciones.
Los morelenses hemos padecido años de legislaturas improductivas, pero la anterior aparte de eso fue dañina porque aprobó leyes y presupuestos que han dañado la vida del estado de Morelos y la economía de sus habitantes y los actuales diputados se han empeñado en seguir el mismo rumbo.
Los votos emitidos el primero de julio para elegir legisladores han sido claramente burlados y se fueron a la basura.