Las complicaciones de los cambios introducidos por el gobierno federal en materia de salud provocaron que las autoridades estatales se tengan que hacer cargo del pago de salarios de los trabajadores adscritos a distintos programas del ramo, lo que también ha generado focos de agitación social.
En materia educativa existe el riesgo de que ocurra algo parecido, ante los recortes y modificaciones a varios importantes programas, como el de construcción de escuelas o el de escuelas de tiempo completo, cuyos recursos no solo no han sido entregados sino que llegarán por otras vías –en apariencia directo a los padres de familia- y no a las arcas del gobierno del estado.
Lo anterior vale la pena difundirse con amplitud para evitar que ocurran protestas como las que ha vivido la entidad por otro tipo de retrasos.
Los grupos afectados incluso han tomado como rehén a la población morelense, por lo que es mejor que la ciudadanía esté enterada de que son las modificaciones federales las que pueden afectar la buena marcha de importantes sectores gubernamentales.