Las manifestaciones en contra del acoso sexual de profesores a alumnas o alumnos se había manifestado en Morelos principalmente a nivel superior, pero ahora desde el bachillerato, quienes se dicen víctimas de ese mal han alzado la voz para exhibir a los docentes que insisten en utilizar su posición de fuerza para someter a sus víctimas.
Las conductas que se denuncian están tipificadas como delito, por lo que la situación en las dos escuelas que ayer dijeron basta no puede terminar en ese reclamo, sino que deben llevarse a la justicia.
Cuesta trabajo entender que a estas alturas existan personas como las denuncias y como aquellas que los protegen, pero confiemos en que las protestas de ayer tengan la suficiente repercusión para que inhiban otros casos o para que inciten a denunciar a otras víctimas.