Poco más de la mitad de la población de Morelos está constituida por mujeres, las principales afectadas por la inconstitucional actuación de los diputados locales que controlan el Congreso local, ya que incumplen el mandato de la Suprema Corte de Justicia de la Nación para despenalizar el aborto.
Que esa acción se lleve a cabo no significa que todas las mujeres están obligadas a interrumpir su embarazo, sino que quienes realicen ejerzan esa opción no sean sometidas a proceso penal ni arriesguen su vida al tener que recurrir a prácticas clandestinas e insalubres.
Por eso, si las feministas que ayer se manifestaron en contra de los legisladores persisten e inciden en su propuesta de promover el voto de castigo contra los “representantes populares” aludidos, estos ya tienen garantizada su merecida derrota. Y ese es apenas uno de los numerosos agravios que los dueños temporales de una curul han hecho a la sociedad morelense.