La calle Guillermo Gándara permitía llegar a la sede del Congreso local desde sus dos sentidos pero constituía un riesgo para los conductores que iban en dirección a El Vergel, por el peligro a la hora de incorporarse a la avenida Plan de Ayala o al circuito López Mateos.
Cualquier elección implicaba una maniobra peligrosa por la circulación continua de vehículos y la dificultad de sincronizarse con los semáforos.
Ahora que esa arteria es de un solo sentido el paso obligado para incorporarse a la avenida Plan de Ayala en cualquiera de sus sentidos es ordenada y sin sobresaltos.
Definitivamente el número de percances disminuirá y aunque podría complicarse el tráfico en la nueva ruta, la medida es beneficiosa.