Prestar atención al tema del aumento del uso de las motocicletas es algo urgente en México y desde luego en Morelos. En cualquiera de sus vertientes existen problemas por resolver.
Uno de ellos es el riesgo latente en el que se han convertido las carreteras libre y de cuota México-Cuernavaca los fines de semana, que son una especie de circuitos de carreras donde los motociclistas vulneran la seguridad de quienes por ahí transitan, pues cada ocho días es común saber de accidentes donde los costos, incluso, son fatales.
También lo es esa práctica que lamentablemente se está normalizando, en la que familias de hasta cuatro o cinco integrantes viajan a bordo de estos vehículos de dos ruedas y transitan por avenidas principales sin el menor cuidado.
Qué decir de los permisos de circulación o la falta de placas para motocicletas, lo que de igual forma contribuye a la inseguridad.
Regular todas estas prácticas ya no puede esperar, son muchos los riesgos y los vacíos amenazan con agudizarlos.