No hay nada más triste que ver a una persona que no se sabe dar a respetar, y aún peor si es mujer, eso creo yo.
En una larga etapa de mi vida, yo fui ese tipo mujer. Fue una experiencia de la cual no me siento orgullosa y que ahora me da coraje recordarla, mucho más que vergüenza.
Esta situación, que para mí fue un hobbie o deporte, atañe a hombres y mujeres por igual.
Hace apenas unos días una amiga me llamó con urgencia; tenía que contarme algo importante para ella. Nos vimos y enseguida que nos sirvieron nuestro latte con leche de soya, empezó a relatarme su drama. Como todas las mujeres que no se respetan a ellas mismas y que cuentan con una autoestima baja, se enganchó en una relación tóxica. Yo escuchaba como se rebajaba a buscar a un fulano y como éste la bateaba, sintiéndose patrimonio de la humanidad, y lejos de pensar que era un patán, no pasa por mente más que este pensamiento: “Él no es el que está mal, él está bien, está haciendo lo que cree en ese momento es mejor para su vida, que es no estar con mi amiga, y nadie lo puede juzgar por ello”. Pero ella lo acosaba tanto que terminó el fulano siendo grosero y altanero, ella aún esas contestaciones INSISTÍA, hasta que me la bloquearon. Por más que yo le decía: “ya déjalo por la paz, olvídate de él y sigue con tu vida, tus proyectos”, parecía que ella escuchaba “ve, búscalo, humíllate más”. Y es que así va a ser hasta que ella no se dé así misma lo que se merece. Mientras ella siga en el error, creyendo que sin él o cualquier otra persona no vale nada, que no tiene sentido su vida, y siga encerrada en ese pensamiento ASÍ SERÁ. Y esto lo asevero porque yo lo viví.
Existen diversos medios para salir de una relación tóxica. Terapeutas por ejemplo, pero repito como perico, si no lo queremos hacer, así se nos aparezca la Virgen, no pasará. La decisión de salir de ese mal estilo de vida, de esa manera insana de relacionarse con los demás, está en nosotros mismos, en nadie más.
Recuerdo cuando yo estaba enfrascada en una relación tóxica con mi ex, y esta misma amiga me aconsejaba, me decía: “déjalo, no es para ti. Es un pelado, grosero, naco…”. Me decía: “Amiga tú tienes un gran corazón, nadie se merece ese trato que te da ese estúpido y menos tú que eres un excelente ser humano”. Y ahora verla en esa misma situación me indignó y le recordé sus propias palabras, pero se excusaba diciéndome que no era lo mismo, porque a ella sí la amaban. ¡CÓMO que no es lo mismo! Es lo MISMO por Dios, el maltrato es maltrato aquí y en China, aunque te digan que te amen…
Cómo salí de este modo de vida; bien pues surtiéndome de muchos eggs y rodeándome de amigos sanos, libres y positivos… Me llené de planes y proyectos para mi persona, donde no se incluía una pareja (si llegaba bienvenida, si no, adelante) planes que llevé a cabo, busqué viejas amistades e hice nuevas que conseguí en mis nuevas actividades, clases de inglés, por ejemplo.
Fue difícil en un principio, pero hoy puedo decir que esta libertad y paz que siento al estar sola, no la cambio por nada, ni por el hombre más guapo sobre la tierra, a no ser que me permita seguir realizando mis metas en libertad y no me fastidie con celos o envidias!
De verdad, se los digo, hay tantas cosas por hacer cuando tenemos vida y salud que muchas veces se consiguen y disfrutan más cuando estás sola, a no ser que tengan la suerte que tuve yo; de tener un novio exitoso y sexy que ama que yo esté ocupada realizándome… y que disfrutamos al 100 los momentos que estamos juntos.
Hasta la próxima.
I love <3