“De la nada se paró un auto justo en enfrente de la cafetería y con gran apuro se bajaron del auto tres tipos con pistola, si señores se trataba de un asalto. Ya después nos enteramos que el auto ya llevaba varias vueltas que se daba cerca de la cafetería.”
En días pasados, justo el lunes 19 que tembló me fui a tomar un café con una buena amiga que hacía mucho no veía, y bueno nos teníamos que poner al día.
El primer tema a tratar obvio fue el temblor; la cosa estaba caliente aun. Y las dos coincidimos en la Ley de la Atracción. La cual refiere a que las personas somos capaces de atraer cosas al centrarnos con ayuda de energía en nuestros pensamientos y de cierta forma "llamar" lo que deseamos.
Osea que somos nosotros mismos que estamos atrayendo un temblor mediante el poder de la mente.
Y total que nos enfrascamos en esta teoría y ninguna de las dos prestamos atención a lo que ocurría a nuestros alrededor.
De la nada se paró un auto justo en enfrente de la cafetería y con gran apuro se bajaron del auto tres tipos con pistola, si señores se trataba de un asalto. Ya después nos enteramos que el auto ya llevaba varias vueltas que se daba cerca de la cafetería.
Bueno nos tomaron de sorpresa, nuestra mesa era de las primeras porque habíamos decidido tomar el café en la terraza que está en la entrada del lugar. Mi primer instinto de supervivencia fue esconder mi celular debajo de unas de mis piernas (ya estaba en silencio) después tome mis anillos y aretes, de oro, y los arrojé a mi taza de café. Mi cartera no logré esconderla :(
Uno de los hombres se quedó afuera con el señor del valet parking y los otros dos entraron al lugar y exigieron a los clientes entregaran sus pertenencias. Mientras el hombre que quedó afuera exigía las llaves de un auto en particular. En cuanto las obtuvo gritó “vámonos” y los otros dos hombres salieron apresuradamente y huyeron.
Afortunadamente a nosotras nos quitaron nada, pero hubo otros afectados.
Este hecho violento m hizo recordar otro asalto qué viví en una farmacia.
Me encontraba al interior de la farmacia cuando un cliente salió de la farmacia y se escucharon unos gritos, acto seguido las empleadas corrieron a esconderse, dejando a los clientes a su suerte. Fue el primer asalto que vivía y mi corazón latía despavorido. Y lo primero que pensé fue en poner a salvo mis pertenencias. Pensé en aventar mi bolsa al otro lado del mostrador y las llaves de mi auto al refri de paletas… pero todo fue tan rápido que no hubo necesidad de hacerlo porque los ladrones no entraron ya que se robaron el auto del señor que iba saliendo. Una vez más me salvé de perder mis cosas.
Confío en que Dios y mis ángeles me sigan protegiendo.
No se confíen nunca! Siempre estén alertas y de preferencia no traigan cosas de valor, ya sé no se vale, pero que hacemos :( y si pueden paguen un seguro para su auto de cobertura amplia, porque los asaltos no creo que dejen de pasar. Más vale proteger nuestro patrimonio.
Cuídense mucho y ojalá esto que hoy les comparto les sirva de algo.
#NoSeVale #Protegete #QueyaNoTiemble
Hasta la próxima