Todas y todos sabemos que no debemos andar por colonias peligrosas o andar muy tarde por calles oscuras, pero… ahora resulta que eso no es suficiente para asegurar tu integridad.
Hace apenas unos días asaltaron con violencia y rudeza a una amiga a plena luz del día y en una calle muy transitada (Teopanzolco) Llegaron dos personas, un hombre y ¡una mujer! el hombre la tomo de los brazos para que soltara el celular que llevaba en las manos; la mujer mientras vigilaba que nadie los viera, ellos hablaban algo de un auto, obvio mi amiga entro en un pánico mayor y se echó a correr cuesta a bajo por el pavor de que la fueran a subir a un auto. Paro cuando se sintió segura, jamás había corrido a esa velocidad. Y miren no solo es hecho de haber perdido el celular que hoy en día es nuestra vida entera… recuerdos, contraseñas, contactos, TODO está ahí. Es el susto y el peligro que ella corrió en ese día. Todavía lo cuanta y llora; ¿será que esas personas hoy son ricos por la venta de ese celular? Y la otra es que donde la asaltaron hay una cámara de vigilancia de un complejo habitacional. Ella le pido a la persona de vigilancia que le permitirá ver el video para conocer el rostro de sus atacantes (porque todo fue tan rápido que logro reconocerlos) le dijeron que no podían hacerlo que debía hablar con el administrador del lugar y pedir tal vez permiso a las autoridades del estado. Creo que no es justo que pongan tantas piedras en el camino para poder poner en evidencia a esas personas que son unos criminales.
Ese mismo día le robaron el celular (también) a la guardia de seguridad de mi condominio. A ella se lo quitaron en la ruta no fue con violencia porque ni cuenta se dio.
En estos dos casos las dos mujeres iban distraídas y confiadas y esto las puso en esa situación de vulnerabilidad. Siempre que andemos en la calle hay que andar con los sentidos alertas. En la calle no debemos confiar en nadie y desconfiar de todos.
Recuerdo que una ocasión vi que un hombre se acercaba a un mujer que caminaba sola por la cera, yo iba en auto de inmediato toque el claxon como loca; el tipo se detuvo y echo a correr. Me detuve y le pregunte a la chica si estaba bien y me ofrecí a llevarla a su casa. Esto me hace recordad también que en una ocasión escuche en algún medio de comunicación que deberíamos de traer siempre con nosotros en silbato y usarlo cuando estemos en peligro. Creo que lo implementare de hoy en adelante.
La cosa es que no contamos con la seguridad por parte de las autoridades y que somos nosotros mismos los que nos tenemos que cuidarnos unos a los otros. Porque una cosa es segura, tenemos que salir de nuestras casas sí o sí. Y aunque nos dé un poco de pereza hay que denunciar cualquier delito, hacer presión (darles trabajo y la lata a las autoridades) hasta que las cosas cambien.
Hasta la próxima.
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