Más allá de las banderitas tricolores y de todo lo que nos dan adicional a lo típico de estas fechas creo que nos debemos poner a pensar seriamente en lo que han sido estos "festejos" del bicentenario del inicio de la independencia, lo que nos ha costado y lo que hemos obtenido a cambio.
Los partidos políticos, todos sin excepción, tienen la obligación de rendir cuentas y de hacer que se rindan.
Los tres niveles de gobierno no pueden usar como pretexto que estamos enfiestados para gastar y gastar y gastar.
Pero bueno, hoy hay problemas de espacio y tendré que esperar hasta mañana para seguir con el tema.
Ni la iguana verde, tan dichacharera, podrá opinar. Tendrá que aguantarse.