Poco más de 45 unidades cayeron en ese supuesto. Todos ellos deberán pagar una multa y una sanción, pero podrán circular libremente con su auto.
La medida de llevárselos al corralón provocó una verdadera histeria entre los incumplidos, que lo mismo guardaron los coches y usaron el transporte público que dejaron la unidad sin placas (algo que también es infracción) para evitar el pago de grúa y corralón, que no serían cifras pequeñas, pués los dueños de ese negociazo siempre han sido y serán unos abusivos.
Pero la medida adoptada ayer en Cuernavaca seguro se replicará en el resto de los municipios y todo quedará como un gran susto.
Y es que hay tantos motivos de protesta, que gente como Gabriel Rivas Ríos, Juan Juárez Rivas y otros profesionales de la inconformidad se frotaban las manos ante lo que se avecinaba, pues habría ,muchos a quien representar.
Ahora los problemas de siempre seguirán en el centro de la atención público y no habrá temas nuevos. Por lo menos no uno de la dimensión que se avecinaba y que ha quedado desactivado.