Al interior del Ayuntamiento, aceptan algunos funcionarios, no se sabe quién manda; hay áreas en las que aparecen dos o tres nombramientos en un mismo cargo, como en el caso de comunicación social, porque la maestra cuenta con su equipo, pero ya la exalcaldesa Gisela Mota había nombrado a Laura Ocampo como responsable.
La madre de Gisela, Juana Ocampo, es la presidenta del sistema municipal DIF Temixco, y se considera que es la parte más funcional de la comuna, porque ella venía ya con cierta experiencia; en su oportunidad fue regidora, además de contar con una trayectoria de lucha partidista.
Hay quienes consideran que Camacho García debería ser evaluada, para valorar su permanencia en la presidencia, sobre todo porque sus condiciones físicas parecen estar generándole serias dificultades; hace unas semanas sufrió un accidente que la dejó fuera por algunos días.
El problema es que el rezago se acumula, los compromisos se multiplican; a medio año de ejercicio en la comuna los resultados son incipientes y ya se aprecian reacciones ciudadanas que demandan más trabajo y sobre todo claridad en el manejo del presupuesto público.
Camacho García enfrenta además una deuda superior a los 200 millones de pesos, heredada por su antecesor Miguel Ángel Colín Nava, quien viene siendo investigado por presuntos desvíos y no parece haber manera de sobreponerse, porque no existe ni equipo de trabajo, proyecto o estrategia para resolver la problemática de un municipio golpeado por la delincuencia y escasamente apoyado por el gobierno estatal.