Sólo así se puede entender que la dirigente nacional del PRI haya designado a Juan Antonio Ixtláhuac Orihuela como Delegado General del CEN en el estado de Morelos.
“Ixtláhuac Orihuela, con una destacada trayectoria partidista, legislativa y administrativa, recibió de manos de la lideresa nacional el nombramiento correspondiente y agradeció la confianza que el partido ha depositado en su persona para representarlo en la entidad morelense”, dice el boletín oficial donde se da a conocer el nombramiento.
Y se menciona que Juan Antonio Ixtláhuac Orihuela ha sido diputado federal y local por Michoacán, así como presidente municipal de Zitácuaro, coordinador general de Atención Ciudadana estatal, Coordinador de los Alcaldes de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares en el mismo estado y vocal ejecutivo de la Federación Nacional de Municipios de México.
Lo que no se dice del michoacano es que estuvo preso por supuestos nexos con la delincuencia organizada cuando fue presidente municipal de Zitácuaro, Michoacán, y que viene de sufrir una apabullante derrota como candidato a la senaduría.
Ciertamente salió libre por falta de elementos, y si perdió las votaciones fue por la ola morenista que arrasó con todos los partidos, pero lo que es indiscutible es que la Auditoría Superior de Michoacán (ASM) le inició el procedimiento AMOP-026/2014, pues el ex diputado local priísta no logró solventar observaciones al presupuesto municipal de obra pública correspondiente al ejercicio 2009.
Por tanto, se le obligaría a reintegrar al erario público municipal un monto por 12 millones de pesos, sanción a la que se incluye una inhabilitación por tres años para el ejercicio de empleos, cargos o comisiones en el servicio público.
En el llamado “Michoacanazo” , los presidentes municipales que en esa ocasión fueron detenidos son: Genaro Guízar Valencia, de Apatzingán; Armando Medina Torres, de Nueva Italia; Uriel Farías Álvarez, de Tepalcatepec; Jairo Germán Rivas Páramo, de Arteaga; Antonio González Rodríguez, de Uruapan; Audel Méndez Chávez, de Coahuayana; José Cortez Ramos, de Aquila; Osvaldo Esquivel Lucatero, de Buenavista; José Luis Ávila Franco, de Ciudad Hidalgo; Adán Tafolla Ortiz, de Tumbiscatío; Juan Antonio Ixtláhuac Orihuela, de Zitácuaro; y, Francisco Estrada García, de Nuevo Urecho.
Antonio Ixtláhuac fue liberado al igual que varios de los acusados en el sexenio calderonista al no encontrarse pruebas en su contra pero su imagen nunca quedó limpia del todo.
También, seguramente muchos recuerdan aquel video que transmitió la televisión nacional en el que aparecía Servando Gómez Martínez, alias “La Tuta”, en medio de varias personas y decía lo siguiente:
“Estando aquí reunidos los señores de la familia Estefan, está la muchachita Estefanía, está el muchachito Maico, está el señor Salvador, el señor Guillermo, la señora Nora, que era legalmente la esposa del señor que ya falleció, Maico Estefan, aquí el problema es que hubo una herencia, en donde la tercera parte es de éstos señores, (Salvador y Guillermo Estefan), no pertenece a otra persona, pero moralmente ellos reconocen que tienen derecho a quien reconocen como hijo, (Maico Estefan Jr.), a la que fue su esposa en la cuestión civil, (señora Dora), y a un muchachito que no está presente, (Christofer), que le vamos a hacer llegar una casa de Fovissste en la región de Zitácuaro y 500 mil pesos en efectivo”.
“Ella es Estefanía, ella se está quedando con un restaurant con valor de un millón y medio de pesos y una casa ubicada en la calle Lerdo, (en Zitácuaro), se está quedando con la casa, la más jodida, la de peores condiciones, con valor de un millón, para acumularle dos millones y medio que es su parte proporcional de herencia”.
“El es Maico, Maico se va a quedar con la otra casa que aparece en Lerdo con valor de un millón de pesos y un terreno que posiblemente valga un millón 300 mil pesos, el cual lo va a tener que vender en su tiempo y forma y es donde le va a tener que dar 500 mil pesos a la brevedad posible a su hermanito Christofer del cual no conozco pero éstos que están aquí son tíos padres y son hermanos del difunto y como un acuerdo están de acuerdo de que al niño, (Christofer) se le deje la casa del Fovissste con un valor de 350 mil pesos y 500 mil pesos que le va a entregar este muchachito, (Maico).
“Para este señor, (Salvador), que tenía el 75 por ciento de las propiedades en el testamento y para este señor, (Guillermo) que tenía el 25 por ciento, porque así lo decidió el difunto hermano de ellos, ellos legalmente podrían quedarse con todo, pero moralmente quieren darle participación a sus familiares, se quedan con un hotel, (Monarca, ubicado a la entrada de Zitácuaro), con un valor de 15 millones 500 mil pesos, de los cuales nos tendrían que aportar tres millones de pesos a la empresa, en su tiempo y su forma, yo me pondría de acuerdo con este señor, (Salvador) y ellos se pondrán de acuerdo entre ellos, porque así siempre han estado”.
Finalmente, La Tuta se dirige a la señora Nora: “A esta señora que está de este lado, es la señora Dora, era legalmente la esposa del señor que falleció, a ella le va a quedar la casa que era del señor, con un valor de 2 millones y medio de pesos. Hay una situación que estamos omitiendo, cuando se suscitaron los problemas alguien nos donó seis millones de los cuales voy a recuperar tres millones de ellos, y de ustedes no he recuperado nada, nos pondremos de acuerdo para recuperar los otros tres millones?”. Luego les pregunta La Tuta: Están de acuerdo? Y todos contestan que están de acuerdo.
Carmela Estefan Colín es hermana de Maico Estefan, y esposa del senador priísta Asunción Orihuela Bárcenas. Tienen dos hijos: Eduardo y Juan Carlos Orihuela Estefan (ambos diputados locales) y un sobrino de nombre Juan Antonio Ixtlahuac Orihuela, en ese tiempo alcalde de Zitácuaro.
HASTA MAÑANA.