Levantó la cortina y la luz del sol entró hasta el fondo de su establecimiento donde vendía tacos desde varios años atrás. Lo que vio fue una escena espeluznante: un charco de sangre y en medio un hombre al que le faltaba la cabeza y los órganos genitales.
Al poco rato llegó el Servicio Médico Forense para realizar el levantamiento del cadáver en esa taquería de la colonia 12 de octubre, municipio de Cuautla. Todavía no terminaban la diligencia cuando recibieron un segundo reporte sobre el hallazgo de una cabeza humana en la calle Vicente Suárez de la colonia 12 de Octubre de Cuautla, por lo que se dirigieron hasta el lugar, y al revisarla se percataron que pertenecía al cuerpo hallado en la taquería.
El levantamiento de cadáver en la taquería se realizó a las 10:25 de la mañana, sin embargo, horas más tarde, en la calle Sifón de la colonia Ferronales de la Heroica se localizó un automóvil Volkswagen Jetta color rojo bloqueando la vialidad.
Sobre este vehículo, la Procuraduría de Justicia detalló que al ser inspeccionado se encontraron diferentes tarjetas de identificación que pertenecían a Martín Gutiérrez Franco, el mismo al que le habían cortado los testículos y el miembro viril, pero que antes le hicieron un corte sobre el muslo provocándole una hemorragia que prácticamente le vació el cuerpo en cuestión de minutos.
Todo eso quedó registrado en la carpeta número CT-UIDD-C/585/2012 de la entonces Subprocuraduría de la Región Oriente.
¿Quién había sido el autor de tan atroz crimen?
Don Alfredo confesó que el único que tenía la llave de su taquería era su hijo José Alfredo, y que frecuentemente se quedaba a ingerir bebidas embriagantes con un amigo de él al que llamaba Martín. Efectivamente, todo parecía indicar que José Alfredo había matado a su compañero de parrandas, porque casualmente esa mañana su hijo no llegó a dormir a su casa.
El crimen consternó a la ciudad de Cuautla, y fue del dominio público que José Alfredo, el hijo de los taqueros, había huido después de asesinar a su amigo, un vecino de la comunidad de Cuautlixco. Dicen que el señor Alfredo murió de tristeza pues ya nadie quería ir a su taquería donde mataron a ese hombre.
Una nota de Xavier Omaña publicada en La Unión de Morelos, informa que el subprocurador regional, Juan Carlos Fontes Jordán, dio a conocer que el dueño del inmueble, ubicado en la avenida Insurgentes número 528 de la colonia Emiliano Zapata de esta ciudad, acudió a la Subprocuraduría a rendir su declaración correspondiente, pero aún no había ningún detenido por ese hecho.
El pasado domingo por la noche, recibí un mensaje de quien dijo ser un vecino de Cuautla. “El sujeto que aparece en la foto que están difundiendo es el mismo que hace años mató a un hombre en su taquería”, escribió.
Efectivamente, alguien difundió en Facebook la fotografía de una credencial de una gasolinera con la foto de un empleado con el nombre de “Alfredo”, diciendo la habían encontrado tirada en el lugar donde el sábado 10 de agosto fue violada y asesinada una niña de seis años en la colonia Carolina de Cuernavaca.
“No sé si sea el que mató a la niña, pero estoy seguro que sí es el que mató al ingeniero Martín Gutiérrez, lo reconozco perfectamente porque nosotros íbamos con frecuencia a la taquería de su papá de José Alfredo”, agregó.
Luego de que fue detenido precisamente en Cuautla, fuentes de la Fiscalía General de Justicia, consultadas al respecto, confirmaron de manera extraoficial que la persona imputada está relacionada con el hecho ocurrido el lunes 20 de febrero de 2012 en la colonia Emiliano Zapata de Cuautla.
No se sabe a ciencia cierta si José Alfredo permaneció prófugo todo este tiempo, o si fue detenido, procesado y liberado. De todos modos, hay un responsable de que este sujeto haya estado libre para cometer su segunda fechoría en agravio de la menor.
Aunque es aventurado sostener que la muerte de la niña Laydi Magaly se pudo haber evitado si la Fiscalía hubiese realizado su trabajo, lo cierto es que el caso revela el trato que dan a los homicidios: sólo aquellos que impactan a la sociedad son esclarecidos.
Ayer, la Fiscalía General de Justicia anunció que derivado de las “pruebas aportadas”, una jueza de control, impuso a José Alfredo, la medida cautelar de prisión preventiva debido a que de manera oficiosa es un delito grave.
Sera la mañana de hoy jueves, cuando se lleve a cabo la audiencia de vinculación a proceso penal de la persona imputada y la juez resolverá sobre su situación jurídica.
La pregunta que queda en el aire y que trataremos de encontrar la respuesta, es ¿por qué José Alfredo estaba libre cuando había suficientes elementos para que estuviera preso en el penal por el homicidio de Martín Gutiérrez?
HASTA MAÑANA.