Al “G12” no le alcanzan los votos para cambiar a la titular de la Entidad Superior de Auditoría y Fiscalización (ESAF), pero sí para ponerle un vigilante que le haga contrapeso a América López, a quien no han podido quitar y temen que pudiera hacerles “travesuras” a los que fueron alcaldes y que hoy despachan como legisladores.
Se trata de Uriel González Sotelo, un hábil licenciado en Contaduría y Finanzas que conoce la ESAF “como la palma de su mano”, pues ya en una ocasión estuvo como encargado cuando su maestro y guía moral, Vicente Loredo Méndez, presentó su renuncia en diciembre de 2018 después de haber cumplido la encomienda que le dieron los diputados de la LII Legislatura: desaparecer todo vestigio de las malversaciones de Graco Ramírez.
Uriel no contó con los votos suficientes para ocupar la titularidad de la ESAF. Ni él ni ninguno de los 23 aspirantes que se inscribieron, pero por lo menos no lo estafaron como al contador Miguel Ángel Romano, a quien un grupo de diputados le aseguró que con una módica cantidad de dinero tendría asegurado el puesto. Le faltó un voto.
Ante la falta de condiciones para buscar nuevamente la ESAF, Uriel se refugió en el Tribunal Estatal Electoral donde se desempeñó como contralor interno. No sabemos a través de quien, pero el hecho es que de pronto fue llamado a ocupar el puesto de titular del Consejo de Vigilancia, que no es igual que ser el jefe pero su posición es fundamental al interior de la Entidad.
Fue un madruguete. En la sesión del 7 de junio pasado, el diputado Julio César Solís Serrano se levantó de su curul y solicitó la modificación del orden del día para proponer la inclusión del Dictamen con Punto de Acuerdo, por el que se remite al Pleno del Congreso de Morelos, la terna para designar a la persona titular del Consejo de Vigilancia de la Entidad Superior de Auditoría y Fiscalización (ESAF) del Congreso del Morelos.
Y es que, de acuerdo con el párrafo VI del artículo 4º de la Ley de Fiscalización y Rendición de Cuentas del Estado de Morelos, la “Comisión Calificadora, (…) está integrada por los coordinadores de los Grupos Parlamentarios del Congreso del Estado de Morelos”.
La designación del nuevo encargado del órgano de control de la ESAF se sustenta en el artículo 100 de la referida ley, que a letra dice: “El titular del Consejo de Vigilancia deberá cumplir los requisitos que esta ley establece para el Auditor General, durará en el cargo cuatro años y será designado y removido por el voto de las dos terceras partes de los diputados presentes en sesión de Pleno, de una terna propuesta y evaluada por la Comisión Calificadora”, informó más tarde el Congreso a través de su oficina de Comunicación Social.
Luego de la aprobación para que la terna fuera votada en esta misma sesión, el diputado presidente de la Mesa Directiva, Francisco Erik Sánchez Zavala solicitó, con base en el artículo 133 del Reglamento para el Congreso del estado de Morelos, que el procedimiento se llevara a cabo mediante cédula.
Tras ser depositados y contabilizados los votos, el resultado fue el siguiente: Uriel González Sotelo, 12 votos: Ricardo Galván Urióstegui, 1 voto y Gabriela Ríos Salgado, 0 votos.
“En atención a que el nuevo funcionario designado se encontraba en las instalaciones del Congreso del estado, se procedió de inmediato a su rendición de protesta ante el Pleno Legislativo”, dice el boletín. Casi casi iba pasando por la calle Manuel Gándara y le dijeron “ven, tienes que tomar protesta porque fuiste elegido en un cargo”.
Ahora bien, ¿cuáles son las facultades del Consejo de Vigilancia?
Según el artículo 42 de la Ley de Fiscalización y Rendición de Cuentas, el Consejo de Vigilancia tendrá las siguientes obligaciones: I. En el supuesto de que la Entidad Superior no cumpla con el proceso de fiscalización establecido en esta Ley, realizará una investigación y procederá a informar a la Comisión (es decir, a los diputados); II. Expedir certificaciones de los documentos que se encuentren en sus archivos; III. Planear, programar y efectuar auditorías, inspecciones o visitas a las diversas áreas administrativas que integran la Entidad Superior; IV. Presentar denuncias o querellas ante la autoridad competente por la presunción de actos constitutivos de delito imputables a los servidores públicos de la Entidad Superior; V. Recibir y canalizar ante la unidad administrativa de la Entidad Superior que corresponda las quejas y denuncias relacionadas con servidores públicos de la propia Entidad Superior y darles seguimiento hasta su conclusión; VI. Requerir a las unidades administrativas de la Entidad Superior, la información necesaria para cumplir con sus atribuciones; VII. Vigilar que los servidores públicos de la Entidad Superior se conduzcan en términos de lo dispuesto por esta Ley y demás disposiciones legales aplicables; VIII.- Convocar al Consejo Consultivo Ciudadano, a las sesiones de trabajo inherentes a la vigilancia y control de la Entidad Superior; y IX. Las demás que le atribuyan las disposiciones legales y reglamentarias aplicables.
Cabe mencionar que el Consejo Ciudadano Consultivo al que hace mención en líneas anteriores, es un órgano representativo de la sociedad civil, adscrito en forma honorifica al Consejo de Vigilancia.
Según el artículo 45, el Consejo Ciudadano Consultivo, es además, órgano permanente de consulta de la Entidad Superior, el cual estará formado por ocho miembros de la manera siguiente:
Un representante de las organizaciones no gubernamentales en Morelos; un representante de la Federación de Colegios y Asociaciones de Profesionales del Estado de Morelos; un representante de las Cámaras Empresariales del Estado de Morelos; un representante de los colegios o agrupaciones de Contadores Públicos; un representante de los colegios o agrupaciones de Licenciados en Derecho; un representante de los colegios o agrupaciones de Licenciados en Administración Pública; un representante de los colegios o agrupaciones de Licenciados en Economía; y un representante de los colegios o agrupaciones de Ingenieros Civiles.
Como podrá observarse, Uriel no tendrá mucho margen de maniobra, pero sí puede “hacerle sombra” a la encargada de despacho, América López, quien al parecer ya está acostumbrada a las vapuleadas, pues está denunciada ante la Fiscalía Anticorrupción y las diputadas y diputados la quieren quitar a como dé lugar.
Ayer mismo el diputado Agustín Alonso -nuevo padrino de Uriel- declaró a los medios de comunicación que la titular de la ESAF no le ha permitido entrar a las instalaciones de la dependencia al nuevo responsable del órgano interno de control.
Como quien dice, para ca…nijo, canija y media.
HASTA MAÑANA.