Los tribunales aún no dilucidan legalmente cuál de las dos agrupaciones es la auténtica Barra de Abogados del Estado de Morelos A.C. sin embargo, ayer quedó demostrado “de facto” cuál es la que tiene mayor reconocimiento, pues mientras en un hotel al norte de la ciudad Christian Velasco Alcoser le pasaba la estafeta a su hermano en un evento prácticamente privado, cientos de abogados y miembros de la clase política abarrotaban el Jardín Huayacán en torno a la agrupación que encabeza Miguel Ángel Rosete Flores.
“Lo que se ve no se juzga”, diría Juan Gabriel.
Por principio de cuentas, al evento de Rosete acudieron los representantes de los tres poderes del estado: el gobernador del estado, Cuauhtémoc Blanco Bravo; el presidente del Tribunal Superior de Justicia, Jorge Gamboa Olea; y la vicepresidenta de la Mesa Directiva del Congreso Local, Luz Dary Quevedo Maldonado, en representación de Francisco Sánchez, incapacitado por covid.
El tradicional desayuno de la Barra de Abogados se convirtió en una verdadera “pasarela” política, pues estuvieron el senador Ángel García Yáñez, el alcalde de Jojutla, Juan Ángel Flores Bustamante y las diputadas Andy Gordillo, Tania Valentina, Mirna Zavala, el diputado Eliasib Polanco y el “diputade” Roberto Carlos Yáñez.
Del Congreso federal estuvo el diputado Klaus Ritter Ocampo, quien estuvo repartiendo tarjetas, por aquello de que nadie lo conoce.
Algunos que no son abogados pero que fueron invitados especiales de Rosete: el rector de la UAEM, Gustavo Urquiza; la secretaria de Administración, Sandra Anaya; Mónica Boggio Tomasaz Merino, jefa de la Oficina de la Gubernatura, y el secretario de Movilidad y Transportes, Víctor Mercado, a quien incluso le entregaron un reconocimiento por sus más de 30 años como servidor público.
Se puede decir que el desayuno se dividió en dos partes: la primera con los funcionarios del gobierno estatal que se retiraron temprano, sin desayunar. Y la segunda con los que llegaron tarde, ya en un ambiente más relajado, donde abundaron las bromas de Rosete.
El primero en hacer uso de la palabra fue el secretario de Gobierno, Samuel Sotelo Salgado –miembro de la barra- quien celebró volver a ver a muchos de sus compañeros a los que no saludaba desde que se alquiló como consejero jurídico del gobierno estatal.
“Hoy debemos festejar a los y los abogados que buscan el bien común, pero también reprobamos a aquellos que usan su conocimiento jurídico para aprovecharse de otros, porque la Constitución ni nuestras leyes le han fallado a la gente, han sido aquellos que la aplican de manera injusta y errónea”, dijo sin mencionar nombres.
Luego de entregar reconocimientos a los barristas con mayor antigüedad, el gobernador hizo uso de la palabra para reiterar que su administración se mantiene cercana a las necesidades y propuestas que presentan los profesionales del derecho y que abonan al desarrollo del estado.
“La búsqueda de la justicia no es tarea fácil, y eso pone más en alto su labor. Reconocemos su defensa constante y fortalecimiento al Estado de Derecho que resguarda a la ciudadanía, en esta fecha especial mi llamado hacia ustedes es seguir trabajando con lealtad, ética y principios, sigamos uniendo esfuerzos por un mejor Morelos”, afirmó.
Miguel Ángel Rosete ya no soltó el micrófono. Primero confirmó que el gobierno estatal ha tenido una política de puertas abiertas y distinguió la gestión de Cuauhtémoc Blanco al mencionar “coincidimos con usted, que no se pacte con la delincuencia, que se pacte con la sociedad señor gobernador”.
Enseguida, se dirigió directamente al diputado federal presente y a las diputadas y diputados locales para emplazarlos a que trabajen por la materialización de la llamada “justicia digital”, para que no vuelva a ocurrir lo que pasó el año anterior, cuando miles de juicios quedaron paralizados por el cierre de tribunales a causa de la pandemia.
“Señor gobernador, hace un año hicimos una propuesta de llevar a cabo un pacto por Morelos, pero al parecer nuestra solicitud no fue atendida por su anterior equipo de trabajo; hoy aquí, le queremos pedir al secretario de Gobierno, nuestro compañero barrista, que podamos retomar la propuesta de hacer un pacto por Morelos donde participen todos los sectores, los empresarios, transportistas, académicos. ¿Acepta señor secretario?”
A Samuel Sotelo no le quedó otra que asentir con la cabeza.
Luego, pidió que se apoye a la academia de música de Tito Quiroz (quien también es abogado), integrada por niños y jóvenes de los Patios de la Estación. También a un niño atleta con capacidades diferentes que apadrina el ex futbolista Moctezuma Serratos.
Se retiró el gobernador y su comitiva. Ya con menos formalidad, pasó al presídium y les dio el uso de la palabra al senador Ángel García Yáñez y al fiscal general, Uriel Carmona, quien en el momento cumbre de su discurso enfatizó que “esta es la única y auténtica Barra de Abogados del Estado de Morelos”.
También habló el alcalde de Cuernavaca, José Luis Urióstegui Salgado, ex presidente de la agrupación, quien reconoció la importancia de consolidar la justicia digital en la entidad, la cual garantizará que ante cualquier eventualidad, como una pandemia, la justicia no se paralice, al contrario, dará la oportunidad, a través de medios tecnológicos, de llevar a cabo la presentación de demandas, acuerdos, contestación de demandas hasta sentencias.
Acompañaron al alcalde el regidor Jesús Tlacaelel Rosales Puebla (acompañado de su orgulloso padre, Ramón Rosales); la directora general del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca (SAPAC), Evelia Flores Hernández y la fiscal Ambiental, Laura Elizabeth García Méndez.
Entre los invitados especiales estaban los abogados Roberto Coranguez, Ricardo Popoca González y María Eugenia Boyás, quienes durante mucho tiempo estuvieron en “la otra Barra”, y que ahora regresan a la que encabeza Rosete.
Llamó la atención la ausencia del presidente municipal de Jiutepec, Rafa Reyes Reyes, quien canceló de última hora, pues su equipo de logística ya lo estaba esperando.
HASTA MAÑANA.