A pesar de que la Junta Política y de Gobierno de la Quincuagésima Quinta Legislatura mantuvo con exagerada secrecía la lista de aspirantes a la magistratura del Tribunal Unitario de Justicia para Adolescentes, trascendieron tres nombres que pudieran contar con la simpatía de las diputadas y diputados para quedarse con el puesto por los próximos catorce años: Adriana Pineda Fernández, actual fiscal especial para delitos de alto impacto; el magistrado en funciones José Luis Jaimes Olmos, y el ex jefe de asuntos relacionados con la justicia penal, Roberto Soto Castor.
Según informó la oficina de Paola Cruz Torres, la tarde de este miércoles 13 de julio, se cerró el periodo para la recepción de solicitudes para participar en el proceso de designación de un magistrado propietario del Tribunal Unitario de Justicia Penal para Adolescentes del estado de Morelos, siendo un total de 10 aspirantes los que entregaron la documentación que marca la convocatoria lanzada el pasado 4 de julio del presente año.
De este proceso, se seleccionará a los mejores calificados para que el viernes 15 de julio, sean entrevistados en una sesión de la Junta Política y de Gobierno, para posteriormente someter a votación del pleno a los seleccionados de acuerdo al examen de oposición.
La legisladora destacó que esta convocatoria, a diferencia de convocatorias pasadas para elegir a cualquier magistrado del TUJA, fue diseñada para evaluar las capacidades profesionales y la experiencia en la especialidad de las y los aspirantes. Para ello, se contó con el apoyo de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma del estado de Morelos.
Otro aspecto relevante, agregó, es que con este procedimiento se respeta el marco constitucional local, además de que se basa en resoluciones y antecedentes de impugnaciones por procesos opacos y discrecionales del pasado. Esto permitirá que el próximo magistrado realmente conozca sus funciones y este dotado de experiencia probada y de los conocimientos en justicia para adolescentes, concluyó Paola Cruz.
Fue hasta la tarde de ayer que algunos portales publicaron la noticia de la participación de la polémica abogada en el proceso de selección, y con ello inició la preocupación de las y los demás aspirantes, así como el personal del Tribunal de Justicia para Adolescentes que se ubica en el municipio de Xochitepec.
Y no es para menos: Adriana Pineda Fernández no se inscribió en la lista de aspirantes “para hacer currículum”; si lo hizo es porque ya tiene el consenso de un buen número de legisladores y la anuencia del gobernador Cuauhtémoc Blanco Bravo.
De entrada, a nosotros nos parece que el puesto “le queda chico” y que bien podría esperarse a que lleguen las magistraturas del Tribunal Superior de Justicia que incluyen la posibilidad de llegar a la titularidad del Poder Judicial.
Sin embargo, tal parece que Adriana ya se cansó de hacer el trabajo del fiscal sin ser titular de la dependencia, pues con la creación de la Fiscalía de Investigación de Delitos de Alto Impacto (FIDAI), a ella le quedaron prácticamente todos los ilícitos que más preocupan a la sociedad, llenándose rápidamente de trabajo, dejando al fiscal con mucho tiempo libre para acudir a todas las celebraciones del día del abogado, y hasta puede atender personalmente casos tan especiales como la ex actriz que fue maltratada por su propio hermano en Tepoztlán, llevándose las primeras planas en TV Notas y Venga la Alegría.
Ya en varias ocasiones nos hemos referido en este espacio a esta servidora pública a la que conocimos a finales de los noventas cuando recién había egresado de la carrera y era auxiliar de Ministerio Público en la entonces Procuraduría de Justicia de Morelos. Luego se fue al Distrito Federal y estuvo varios años en el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) aprendiendo las labores de inteligencia policial que vino a poner en práctica cuando ingresa por segunda ocasión a la PGJ poco antes de que mutara a Fiscalía General del Estado.
Su efectividad en el trabajo le valió para sortear los conflictos políticos al interior del gobierno durante el sexenio de Graco Ramírez. Fue hábil para no quedar en medio de aquella rivalidad entre Rodrigo Dorantes y Alberto Capella, y luego la llegada del “fiscal sobrino” Pérez Durón, hasta que llegó Uriel Carmona. Todos la han conservado porque es la que saca el trabajo en materia de secuestros y así quedan bien con la sociedad.
De ahí que, si se da su incorporación a la institución que dejó vacante Ana Virinia Pérez Güemes, tendremos una magistrada “de lujo” en Justicia para Adolescentes, aunque las víctimas de secuestro lo lamentarán y Uriel Carmona tardará en encontrar a alguien tan eficiente como ella.
Sin embargo, no nos adelantemos y esperemos la votación de las diputadas y diputados, lo que podría darse mañana mismo, pues al momento de redactar la presente columna nos llegó el aviso de que las entrevistas a los aspirantes se llevarán a cabo la mañana de este viernes, por lo que incluso su designación podría darse antes de que se cierre el periodo ordinario de sesiones.
Si no es ella, sin duda que quien tiene los mayores merecimientos es José Luis Jaimes Olmos, quien es juez especializado en adolescentes desde que se creó el TUJA hace más de 14 años, y obtuvo la calificación más alta en el examen para ocupar el cargo de magistrado suplente que hoy lo tiene ocupando de manera interina la titularidad de ese Tribunal, pero antes tuvo que promover un amparo para que los diputados le respetaran su lugar.
Habrá que ver cuáles son los criterios que toman en cuenta los diputados y las diputadas, pues se entendería que para respetar la paridad de género correspondería a un varón ocupar este puesto en virtud de que la antecesora es mujer y que el actual solamente está cubriendo la ausencia de la titular.
Otro punto importante es que no cualquier profesionista del derecho puede estar en el TUJA, pues incluso a los litigantes se les pide un curso de especialización para permitirles intervenir en las audiencias. Adriana Pineda no es especialista en justicia para adolescentes, aunque tiene casi una década como operadora del nuevo sistema de justicia penal que incluye a los menores de 18 años.
Ahora sí que, como en las competencias deportivas: que gane el mejor, y el que más le convenga a la sociedad morelense.
HASTA EL LUNES.
