El Colegio Electoral de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos propinó un “golpe bajo” a la doctora Olivia de las Casas Vega, quien ha intentado durante años hacerse de la Dirección de esa institución educativa, al negarle el derecho de participar en un proceso de selección inédito en el que una autoridad federal ordenó convocar a elecciones “sólo para mujeres”, tras una larga batalla jurídica.
En este espacio advertimos sobre la posibilidad de que, no obstante ser la quejosa en el juicio de amparo 202/2019, la doctora De las Casas Vega no quedara en el cargo sino alguna otra mujer a la que nada le costó. “Nadie sabe para quién trabaja”, reza el conocido refrán mexicano y aquí se actualiza perfectamente.
El título de la presente columna (“golpe bajo” es un puñetazo ventajoso y tramposo que propina un boxeador a otro) pareciera inadecuado para una batalla en la que participan profesionales del Derecho, pero la verdad es que no encontramos otro título que definiera con mayor exactitud lo que hizo el Colegio Electoral al negarle el derecho a inscribirse como candidata, aplicándole la fracción XII del artículo 117 del estatuto universitario sobre los requisitos para ser director o directora que a la letra dice: “no tener implementada acción legal alguna en contra de la Institución”.
Se entiende que los creadores del estatuto establecieron este impedimento para evitar que llegara a una Dirección alguna persona que tuviera demandada a la universidad por cuestiones laborales o administrativas, ¡pero no por denunciar violaciones a los derechos humanos a través del juicio de amparo!
Recordemos que Olivia de las Casas interpuso el juicio de amparo precisamente para reclamar la violación a sus derechos humanos por parte del Consejo Universitario y del Consejo Técnico de la Facultad de Derecho, y ahora esas mismas autoridades utilizan ese medio de defensa que ella puso en movimiento, para negarle la posibilidad de participar.
La jurista arguyó en su demanda de amparo que el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos señala en su artículo 2 que “toda persona cuyos derechos o libertades reconocidos en el presente Pacto hayan sido violados podrán interponer un recurso efectivo, aun cuando tal violación hubiere sido cometida por personas que actuaban en ejercicio de sus funciones oficiales”.
En su escrito de demanda, la quejosa hizo notar que ya existen precedentes donde otros juzgados de Distrito se han pronunciado respecto a casos similares a este, que además son atípicos, como el presente caso. Pide que se aplique un principio general del derecho: “Donde hay la misma razón, es aplicable la misma disposición”, afirma, y pone como ejemplo dos amparos, uno en la Universidad Autónoma de Nuevo León, y otro en la UNAM.
En su escrito de demanda (cuya copia obra en poder de este columnista), Olivia de Las Casas Vega dice tener 24 años como trabajadora académica y ser la catedrática con mayor antigüedad de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la UAEM.
“En lo que llevo de estar de catedrática en la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la UAEM, hasta el día de hoy, el Consejo Universitario de la UAEM no ha designado a una mujer como directora de la Facultad que derive de un proceso de elección de una convocatoria para el proceso de elección de Director, lo cual señala claramente un acto de discriminación hacia la mujer por parte del Consejo Universitario, cuando es notorio que en la Facultad somos bastantes las mujeres que cumplimos con los requisitos tanto legales como académicos, así como tenemos mayor experiencia y mejor preparación que los designados, sin embargo, es notorio que por razones de género, el Consejo Universitario sólo ha designado hombres como Director de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales”, afirmó.
Y luego de narrar las tres veces que intentó infructuosamente ser designada directora, explica que “el día 11 de febrero del 2019, solicité mi registro como candidato a Director de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos, mismo que me fue admitido el mismo 11 de febrero, sin embargo, la admisión de mi registro sólo es un acto de simulación para aparentar ante la sociedad de que no vulneran ni discriminan a las mujeres, pero en realidad, es un hecho notorio dentro de la Facultad, que por el simple hecho de ser mujer, no me designarán ni a mí ni a cualquier otra mujer que se postule en un futuro, ya que el cargo de director de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la UAEM, en la realidad para el grupo de falócratas que controlan la Facultad, es un cargo que puede ser única y exclusivamente ocupado por hombres”.
Como dijeran los chavos: Fuertes declaraciones de la doctora Olivia, quien tuvo la suerte de que su demanda recayera en una jueza mujer: Nadyelly López Guevara, titular del Juzgado Primero de Distrito.
Fue esta servidora pública quien emitió una histórica resolución: no solamente le dio la razón a la quejosa, sino que ordenó a la UAEM que dejara sin efecto el proceso electoral que ya estaba en marcha y que se emitiera una nueva convocatoria, ¡pero sólo para mujeres!
Se dice en los pasillos de la máxima casa de estudios que la demanda de amparo provocó una gran molestia entre los abogados (todos hombres) tanto de la FDyCS como de la propia Rectoría, quienes acordaron que Olivia nunca llegaría a la dirección de la Facultad de Derecho.
Como ya es del dominio público, el Colegio Electoral calificó como aptas para competir por ese cargo solamente a dos mujeres: Graciela Quiñones Bahena y Gloria Rosario Vergara Salinas, ésta última hija de Raúl Vergara Mireles, quien ya ocupó el cargo que hoy se disputa.
La convocatoria indica que las candidatas deberán comparecer de manera presencial ante los trabajadores académicos y administrativos, en dos sesiones -la primera a partir de las 9:00 horas y la segunda a partir de las 17:00 horas- el día martes 16 de agosto en el auditorio “Fernando Castellanos Tena”.
La jornada electoral será el lunes 22 de agosto, de 8:00 a 20:00 horas, en la explanada del auditorio de la FDyCS, en el campus Chamilpa, en donde se instalarán dos urnas transparentes, una para alumnos y otro para trabajadores administrativos y académicos, aunque la última palabra la tendrá el Consejo Universitario en fecha por definir.
Sin embargo, se espera que otra aspirante que fue rechazada (Michelle Onofre), interponga un recurso de inconformidad, y que la doctora Olivia de las Casas recurra a las mismas autoridades que le dieron la razón en su juicio de amparo, para contarles que por haber ejercido su derecho constitucional, le fue negado el derecho a participar, y a ver qué resuelven.
Preparémonos pues para seguir con otro encargado de despacho o encargada en la dirección de la Facultad de Derecho de la máxima casa de estudios.
HASTA MAÑANA.