Diariamente, en la oscuridad de la madrugada, un grupo de personas acude a los centros de distribución a recoger su bonche de periódicos que habrán de ofrecer a sus clientes, ya sea en puestos metálicos establecidos en puntos estratégicos de la ciudad, o directamente en los cruceros con mayor tránsito vehicular.
Son los voceadores, ese eslabón de la cadena de la comunicación escrita que no por ser el último deja de ser importante. De hecho, si no fuera por ellos, un periódico o revista no podría llegar a los lectores.
El pasado viernes tuvimos la fortuna de ser invitados a la cena-baile de la Unión de Voceadores y Expendedores de Periódicos, Revistas y Similares del Estado de Morelos A.C., en el salón de fiestas del Club de Leones de la ciudad capital.
Esta agrupación cumple 101 años de existencia, aún más que la del Distrito Federal y Guadalajara que surgieron después de 1921. Lamentablemente la pandemia impidió que el centenario fuera celebrado como se lo merecía, pero la fiesta de los 101 años estuvo de lujo, con la presencia de su líder nacional, Don Héctor Molina Cepeda, y la coronación de su reina Adriana Reyes, a cargo de la licenciada Sandra Rodríguez Gutiérrez, directora de Atención Ciudadana en representación del gobernador Cuauhtémoc Blanco Bravo.
La organización del evento estuvo a cargo de la Mesa Directiva que encabeza la licenciada Yunuen Paola Sanvicente Irlas, y contó con la presencia del secretario del Ayuntamiento, Carlos de la Rosa Segura, en representación del alcalde José Luis Urióstegui Salgado, así como directivos de los diferentes diarios de circulación estatal.
Se entregaron reconocimientos a los voceadores con mayor antigüedad y hubo uno muy especial para La Unión de Morelos que a nombre del ingeniero Ricardo Estrada González recibió la jefa de publicidad Luisa Fernanda Rubio Marmori.
Los voceadores han sido protagonistas de la historia de este país. Entre 1823 y 1828, las autoridades prohibieron varias veces el pregón de noticias en lugares públicos, porque fueron acusados de agitadores. Incluso en 1853 el gobierno ordenó que sólo gritaran el título de los diarios y no el contenido de las noticias, pues en su afán de vender más ejemplares, distorsionaban los hechos a la hora de anunciarlos.
En 1895 varios voceadores fueron encarcelados, el gremio fue considerado “perjudicial, escandaloso e intolerable”. Tras la represión y problemas a los que se enfrentaban, en 1923, se fundó la Unión de Expendedores y Voceadores de los Periódicos de México, se organizaba para su defensa y ayuda mutua.
El entonces presidente Adolfo Ruiz Cortínez instauró el 20 de abril como el Día del Voceador que se celebra cada año desde 1953.
¿La aparición del internet tendrá como consecuencia la desaparición de los periódicos impresos? Ese tema fue abordado durante el evento del viernes por algunos oradores y comentado entre los comunicadores que acudimos como invitados.
A partir de 2006 que se anunció que el Post Och Inrikes Tidningar de Suecia, considerado uno de los más antiguos e importantes del mundo, ya no imprimiría más periódicos, cada vez más rotativos han hecho lo mismo, dejando sin trabajo a miles de personas que se dedicaban a expender y vocear ese producto.
En 2013, Lloyd’s List, que fue fundado en 1734 en Londres, dejó de imprimirse para tener únicamente una versión online. Esta misma semana “El mundo” de Córdoba, Veracruz, uno de los más emblemáticos de ese estado, también se quedó sólo con la edición digital.
Sin embargo, el líder de los voceadores a nivel nacional se muestra optimista: “Nunca va a desaparecer el periódico impreso. Cuando nació la radio decían que el periódico iba a desaparecer; cuando nació la televisión dijeron que desapareceríamos, y aquí seguimos más vivos que nunca”, dijo el secretario general de la Asociación Nacional de Uniones de Voceadores de la República Mexicana, Héctor Molina Cepeda.
La dirigente estatal, Yunuen Sanvicente Irlas, secundó a su representante nacional al considerar que mientras estén unidos, los voceadores y expendedores de periódicos, revistas y similares, podrán sortear todos los problemas que vengan.
Carlos de la Rosa, secretario del Ayuntamiento, hizo notar que jurídicamente los expendedores de periódicos no existen, es decir, no tienen un reconocimiento legal en ninguna ley, bando o reglamento, de ahí la necesidad de trabajar juntamente con sus dirigentes a fin de que los puestos de periódicos sean incluidos en la ley de ingresos del Ayuntamiento para que sus agremiados tengan derechos y obligaciones.
Desde nuestro particular punto de vista, el gremio de los voceadores debe transformarse para no morir. Adecuarse a las nuevas condiciones económicas, sociales y legales. Afortunadamente su actual dirigente, Yunuen Paola Sanvicente Irlas, es una de esas personas que gracias a los periódicos que sus padres vendieron, pudieron darles una carrera a sus hijos, y en el caso de Yunuen ella estudió la carrera de Derecho.
Esos conocimientos adquiridos en las aulas son los que van a hacer posible que entienda las necesidades que viven sus agremiados y en general la problemática que enfrenta la ciudad capital para encontrar soluciones que beneficien no solamente a los voceadores, sino a la ciudadanía en general.
Desde esta modesta columna nuestro reconocimiento a todas las personas que hacen posible que ésta llegue hasta los lectores, ya sea a través de la venta de los ejemplares en puestos de periódicos y revistas, o bien al ofrecerlo en los cruceros, caminando entre los vehículos para que el automovilista pueda ver bien las noticias que vienen ese día en el diario.
Por cierto, un dato interesante: el día que se vendieron más ejemplares en la historia de este país fue cuando se publicó el fallecimiento del cantante y actor Pedro Infante. En Morelos, uno de los mejores días -económicamente hablando- para los voceadores fue cuando renunció Jorge Carrillo Olea al gobierno de Morelos. Y en lo que se refiere exclusivamente a La Unión de Morelos, nos comentan que el día que no quedó periódico ni para el archivo, fue cuando se publicó la lista de profesores que cobraban en el Instituto de la Educación Básica del Estado de Morelos (IEBEM), pero estaban “comisionados” en el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) Sección XIX, bajo el título: “Revelan lista de aviadores”.
HASTA MAÑANA.