Con recursos financieros inagotables y bajo la supuesta asesoría del experto en medios que trabajó para Graco Ramírez, un reducido grupo de abogados y abogadas intentó sorprender a los avezados reporteros (la mayoría con más de 30 años de experiencia), que acudieron a su conferencia de prensa para anunciar que emprenderían acciones legales contra “quien resulte responsable” del gobierno del estado.

Dieron lectura a un comunicado en el que se ostentaban como “líderes y representantes de las asociaciones de abogados”, aunque no había más de cuatro y de las menos representativas.

Ahí estaba —como voz cantante— el enigmático abogado Luis Ignacio Reyes Andraca Dumit, quien apareció por primera vez en el escenario público de este estado el 25 de abril del año pasado en una conferencia de prensa ofrecida en la ofrenda de los desaparecidos para exigir justicia por el asesinato de su colega Héctor Soto Rodríguez. Y ahí fue la primera ocasión que se escuchó su nombre y el de su supuesta organización: Nueva Asociación de Abogados Morelenses para México, tan nueva y desconocida como su dirigente.

La segunda vez que apareció en público fue en otra conferencia de prensa (ahora en el lujoso restaurante Casa Hidalgo), en la que prácticamente exigieron a la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, que dejara de hacer declaraciones en torno al caso Ariadna, ya que la única necropsia válida es la primera, y esa dice que murió por broncoaspiración.

—¿Ustedes ya vieron la necropsia? —cuestionó este columnista.

—Sí, hemos tenido acceso a la misma por parte de la Fiscalía—contestó Luis Ignacio Reyes.

—¿En calidad de qué tuvieron acceso a la carpeta? —insistimos.

—Como asociación—replicó.

Después de darse cuenta que la había regado, el nobel litigante trató de justificarse diciendo que el fiscal se había reunido con varias organizaciones y les había explicado el contenido de la carpeta, pero “por supuesto que no tuvimos acceso a la necropsia”, aclaró.

En esta ocasión, en la conferencia de prensa de Vikingos el pasado jueves 11 de mayo, quien lo cuestionó fue el periodista Justino Miranda, corresponsal de El Universal, quien le preguntó por qué cuestionaban la liberación del presunto delincuente apodado “El Diablo” por parte del Poder Judicial y no la deficiente integración de la carpeta por parte de la Fiscalía del estado.

“Parece que a usted lo mandaron”, acusó Reyes Andraca. ‘No, no me mandaron y ahora le pregunto: ¿A usted lo mandó el fiscal Uriel Carmona Gándara?’, reviró el veterano periodista.

Reyes Andraca no pudo ocultar su molestia y todavía refunfuñó hacia sus compañeros: "pero mañana nos entregan las listas de los periodistas, bueno los 'chayotes'".

Desde el otro extremo de la mesa (estratégicamente ubicado para que no se den cuenta de que es quien da las indicaciones), el polémico “Doctor Honoris Causa”, Cristhian Velazco Alcoser, gritaba: “¡Nada te parece!”.

Cristhian Iván Velazco Alcoser fue presidente de la Barra de Abogados en el 2020 pero fue desconocido por sus compañeros al aprovechar la pandemia para prolongar su periodo en la presidencia y después dejar a su hermano Alexis Jair, sin embargo, él es quien decide todo. Una de sus hermanas trabaja o trabajó en la Fiscalía.

De los demás participantes en la conferencia hay abogadas y abogados honorables, quienes estuvieron con el fiscal Uriel Carmona en la reunión de trabajo que sostuvieron el 28 de abril, o en el desayuno del 2 de mayo que ofreció la Fiscalía a un grupo de empresarios y abogados encabezados por sus padres, Uriel Carmona Sánchez y Marinela Gándara, que quizás sólo buscan que sus asuntos en el Ministerio Público avancen con celeridad.

O podrían ser coincidencias, como es el hecho de que, al trasladarse al Congreso local, ya los estaban esperando —incluso con acceso al estacionamiento— las diputadas y los diputados Tania Valentina Rodríguez Ruíz, Paola Cruz Torres y Macrina Vallejo Bello, Agustín Alonso Gutiérrez, Alejandro Martínez Bermúdez, Julio César Solís Serrano y Alberto Sánchez Ortega.

Ahí tomó valor Cristhian Velazco Alcoser y arremetió contra los Poderes Ejecutivo, Judicial y la prensa, a cuyo gremio acusó de protagonizar un “ataque directo” horas antes en la rueda de prensa. Concluyó su participación en medio de la ovación de sus compañeros y diputados. Poco faltó para subirlo en hombros y darle vuelta al ruedo.

Acaso motivado por la algarabía de los abogados, el diputado Alejandro Martínez Bermúdez rindió pleitesías y de forma burda respaldó las injurias del abogado contra la prensa. Su estilo provocó risas y algunas carcajadas ahogadas de reporteros que atestiguaron la reunión abogados—diputados.

Minutos después su compañera de bloque, ambos del G-15, Tania Valentina Rodríguez Ruiz, justificó los dichos de los abogados y sacó la cara por Alejandro Martínez. Endilgó a la prensa el mote de “Cuarto Poder” y desde su espacio advirtió que los medios de comunicación no pueden apagar el descontento social.

Y enseguida se colocó de lado de aquellos que son atacados por criticar al gobierno estatal en materia de seguridad pública. Y entonces pronunció la pésima declaración que sacudió a los reporteros y que algunos consideraron como una velada amenaza:

“Cuando maten a un periodista quiero seguir escuchando a la que se está burlando. Cuando maten a un periodista los voy a ver marchando en las calles molestos por lo que está pasando”, afirmó la legisladora y enseguida se dirigió a la periodista:

“También te quiero pedir a ti, Lety Villaseñor, reportera de MVS, yo te quiero mucho y respeto tu trabajo, pero te voy a pedir que nos dejes seguir con esta reunión. Sé que te mandan a provocarnos, si gustas te damos la palabra al final, pero no interrumpas ni tampoco ataques a mi compañero Alejandro (Martínez), tu voz de burla porque te grabé y te voy a exhibir”, expresó, ante los aplausos desaforados del diputado Alejandro.

Ayer domingo, la legisladora envió un comunicado en el que ofreció una disculpa pública. ”Soy una convencida promotora y defensora de los derechos de la mujer y de la libertad de expresión. A lo largo de mi carrera política he sostenido una relación de respeto y cordialidad con las y los representantes de los medios de comunicación. Si el llamado al orden y respeto a lo que estaban expresando los participantes de la reunión o mis palabras causaron molestia en algunas personas, ofrezco una disculpa al gremio periodístico y de manera particular a la compañera Leticia Villaseñor”, dijo.

Es válida la disculpa y la posición de los abogados que dicen representar a todo el gremio, nada más que no nos quieran sorprender.

HASTA MAÑANA.