El pasado fin de semana aparecieron en público dos de los personajes más polémicos que ha tenido Morelos: Graco Ramírez Garrido y Manuel Martínez Garrigós. Ambos son viejos conocidos y en algún tiempo fueron hasta socios, pero los vaivenes de la política los llevaron por rumbos diferentes, hasta hoy que vuelven a reencontrarse, prestos a aplicar una máxima que ellos tienen como regla: el fin justifica los medios.
Aunque la diferencia de edad es amplia, Manuel y Graco tienen muchas coincidencias a lo largo de su trayectoria política. Los dos estuvieron “en los cuernos de la luna” pero por querer mucho más de lo que la vida les había dado, hoy están mediáticamente muy desprestigiados.
Irónicamente, si Manuel Martínez Garrigós hubiese competido contra Graco Ramírez en el 2012, el resultado podría haber sido totalmente diferente. Sin embargo, Manuel se peleó con los jerarcas de su partido a quienes llamó “gansters” y el PRI mandó a un ranchero malhablado que el candidato perredista superó fácilmente en las votaciones.
Manuel dejó endeudado al municipio de Cuernavaca (no sólo con los bancos, también con el Instituto de Crédito); Graco dejó endeudado al estado, nuestros hijos seguirán pagando la deuda.
Eso sí: ambos pueden presumir que no tienen cuentas pendientes con la justicia. Tienen los mejores asesores jurídicos y supieron hacer sus tranzas sin comprometerse legalmente. Algunos de los que fueron sus subordinados están bajo proceso penal, pero ellos pueden pasear por Morelos sin temor a ser detenidos (hasta ahora).
Recordemos que en el trienio en el que MMG fue alcalde (2009—2012), Graco logró incrustarle en su gabinete a Rodrigo Gayoso, hijo de su esposa Elena Cepeda, en pago por un favor a Beatriz Paredes.
Ahí comenzó su carrera en lo que mejor sabe hacer: estirar la mano para recibir el moche de los proveedores. Como número dos del Ayuntamiento, Rodrigo Gayosso influyó en diversos contratos y adquisiciones.
Después de haber dejado el Ayuntamiento, y reducido su poder a una curul en el Congreso del Estado, Manuel buscó a Graco para que su secretario de Comunicación dejara de atacarlo a través del medio local que seguía operando. El gobernador no lo recibió a pesar de los emisarios que le mandó.
Entonces MMG tuvo una idea: le publicó una carta en redes sociales, recordando aquellos tiempos en que fueron, si no amigos, sí aliados. Se despidió con un “recuerda que quien me presentó con la empresa PADIMEX fue precisamente Rodrigo Gayosso”. Los ataques cesaron.
Otra similitud es que, en algún momento de su vida, ambos perdieron el piso. Manuel pensó que de la alcaldía de Cuernavaca podía saltar a la Gubernatura, en tanto que Graco llegó a considerar que podía pelear la presidencia de la República. Su otro error fue creer que podía seguir gobernando a través de su hijastro. Los dos pagaron las consecuencias de sus errores.
Al parecer, tanto Manuel como Graco se han dado cuenta que la soberbia les ganó, y hoy parecen más centrados en sus respectivas vidas y conscientes de lo que pueden lograr con el poco capital político que les queda.
Manuel intentó subirse a la “ola Morena” e incluso estuvo algunos meses como funcionario federal en la actual administración de AMLO, pero su pasado no se lo permitió. Graco fue aliado de AMLO en el 2012, en los siguientes años se respetaron como paisanos que son, pero hace algunos meses “lo pilló” —como dicen los españoles— ayudando a Xóchitl Gálvez y no se la perdonó. Mandó encarcelar al fiscal que había dejado y seguramente ya estarán viendo cómo le reviven algunas carpetas de investigación que Uriel Carmona se había encargado de esconder.
Una nota de La Jornada Morelos da cuenta de que “el ex gobernador de Morelos, Graco Ramírez, y el ex alcalde de Cuernavaca, Manuel Martínez Garrigós, han unido fuerzas para establecer una red de apoyo en el estado en favor de Xóchitl Gálvez, quien busca la candidatura presidencial por la coalición “Va por México”.
“Desde esta asociación, buscan obtener registros de ciudadanos dispuestos a participar en el proceso del próximo 3 de septiembre, donde se elegirá al candidato de entre la terna conformada por Xóchitl Gálvez, Beatriz Paredes y Santiago Creel”, dice la nota firmada por Angélica Estrada.
Según esta publicación, la organización ha sido denominada “Red Ciudadana Xóchitl Gálvez Morelos” y también ha sumado a sus filas a ex funcionarios de la administración del ex gobernador perredista, como Ángel Colín (exsecretario de Gobierno), Armando Sanders (exdirector de Hacienda), Brenda Valderrama (exsecretaria de Ciencia y Tecnología), Javier Bermúdez (excoordinador de Protección Civil), Jorge Michel Luna (exsecretario de Hacienda, actualmente bajo investigación de la Fiscalía Anticorrupción por supuestas anomalías), Nadxelli Carranco (extitular de la Comisión Ejecutiva de Atención y Reparación a Víctimas) y Roberto Silva (extitular de la SEDAGRO), entre otros.
Así las cosas, ahora tenemos que la lista de posibles candidatos a la gubernatura del estado por el Frente Amplio por Morelos (mejor conocido como TUCOM), ya creció: José Luis Urióstegui, Ángel García Yáñez, Laura Ocampo Gutiérrez, Mayela Alemán Olvera, Eliasib Polanco Saldívar, Julio Yáñez Moreno…. y Manuel Martínez Garrigós.
MIENTRAS TANTO EN LA ESAF
En la semana de vacaciones, del 17 de julio y los siguientes días, Giovanna González Cerezo, directora de Administración de la Entidad Superior de Auditoría y Fiscalización del Congreso local, ordenó vaciar tres bodegas con papelería de auditorías activas. Entre ellas las de los actuales diputados cuando fueron alcaldes. Los encargados de cargar las cajas a un camión que fue rentado fueron nada menos que los directores que recién llegaron y que como no tenían derecho a vacaciones, los pusieron a vaciar y cargar cajas.
Una de esas personas es la hermana del priísta Jorge Meade Ocaranza, una señora mayor que incluso durante la mudanza se desvaneció. Una compañera de ella se acercó a auxiliarla, y en ese momento Giovanna les dijo que dejaran de “hacerse las tontas" y que siguieran cargando las cajas. No hubo una relación por escrito de cuántas cajas y qué clase de información se llevaron. Solo llenaron el camión.
Esta funcionaria es la misma que hace poco, sin procedimiento de desincorporación alguno, ordenó que se vendieran como “chatarra” al menos 17 vehículos propiedad de la ESAF.
HASTA MAÑANA.