Ocurre por igual en todos los municipios, los que gobierna Morena, el PAN y hasta los de Nueva Alianza: los programas y obras de los Ayuntamientos son opacados por la disputa palmo a palmo que libran los diferentes grupos de la delincuencia organizada. La justificación de que “se están matando entre ellos”, o que “es un fenómeno que ocurre en todo el país”, no es consuelo para los morelenses.
La desgarradora escena en la que una niña pide ayuda a gritos mientras sus padres yacen muertos en el interior de una camioneta con huellas de haber sido rafagueada, a plena luz del día y en una de las principales vías de comunicación, es el último video que se ha viralizado y que aparece en todos los medios nacionales como un hecho ocurrido en el municipio de Yautepec.
Contra ese fenómeno mediático (videos que entre más explícitos más llaman la atención y al hacerse virales son retomados por portales de todo el país e incluso del mundo) no hay campaña de comunicación social que sirva.
En Yautepec gobierna una persona de la tercera edad conocida y querida por su pueblo: don Agustín Alonso Mendoza, tres veces alcalde. Hay obras por todos lados, no tiene conflictos laborales ni deudas, pero si alguien ahorita “googlea” la palabra Yautepec, seguramente lo primero que aparecerá lo de la camioneta balaceada.
Ayer la Fiscalía General del Estado confirmó que fue un ataque directo, descartando la posibilidad de un asalto, lo que no contrarresta el injusto descrédito para los habitantes de esa localidad.
Unos kilómetros más adelante, en la heroica ciudad de Cuautla, el alcalde Rodrigo Arredondo todos los días visita colonias y poblados para llevar la campaña “Cuautla Alerta: Reporte Preventivo”, en el que con el apoyo de los COMVIVES se busca vigilar y denunciar actos delictivos o personas sospechosas que pongan en riesgo sus localidades a través de línea segura 735 181 11 88. Apenas anunció que en breve dará inicio un programa para llevar servicios de alumbrado público, pintura, limpieza de calles, bacheo y recolección de basura en la ciudad.
Su esposa, Araceli García Garnica, recientemente inauguró la remodelación del parque infantil Emiliano Zapata, el cual consistió en el rescate de la Unidad de Manejo para la Conservación de Vida Silvestre (UMA) "Tortugas de Cuautla", un espacio recreativo para conocer el cuidado de las tortugas, área de comida, sanitarios adaptados para personas con discapacidad y una tienda de auto servicio.
Sin embargo, en los medios de comunicación y redes sociales, lo que resalta son las cosas negativas como lo que ocurrió el martes, cuando criminales primero atacaron a balazos un hombre en la colonia Xochipili y luego este mismo grupo de hombres armados, incendió un establecimiento comercial en donde una mujer que se encontraba en el interior resultó con quemaduras graves y fue llevada para su atención médica a un hospital, mientras que ese negocio quedó convertido en cenizas, según reportó La Jornada nacional.
Lo peor fue que al huir de este lugar los criminales protagonizaron con elementos policiacos, un tiroteo a balazos que alcanzó una ruta 12 del trasporte público de este municipio. Aquí resultó afectado el chofer y otra persona, además la unidad motriz también recibió impactos de bala.
Posteriormente, en la colonia Hermenegildo Galeana, a unos metros del Cbtis 176 de Cuautla, el auto en el que supuestamente huyeron lo agresores del establecimiento quemado y de la persecución policiaca, los propios criminales lo incendiaron en un terreno baldío.
Rodrigo Arredondo es de Morena, y sus enemigos políticos recalcan esa circunstancia como si fuera cuestión de partidos, lo cual es totalmente falso: la delincuencia organizada opera sin importar de qué instituto político provenga el alcalde.
En Cuernavaca, donde gobierna el candidato ciudadano José Luis Urióstegui Salgado, quien llegó al cargo bajo las siglas del PAN y el PSD y que ahora lo más seguro es que sea el candidato de la coalición PRI-PAN-PRD y RSP en busca de la reelección, la seguridad también es su “dolor de cabeza”.
La mañana del lunes, un hombre fue privado de la vida con arma de fuego en la comunidad de Santa María Ahuacatitlán de Cuernavaca. Fue a las 09:10 cuando se registró movilización de la Policía, luego de que reportaron que una persona acababa de ser atacada a balazos en la prolongación Independencia de la comunidad antes referida.
Después, los paramédicos que acudieron al auxilio confirmaron la muerte del individuo, quien tenía diversos impactos de bala, según el reporte de Alejandro López Arce.
Después se supo que el hombre fallecido era el mismo que días antes había sido atacado junto con su familia sobre la avenida Universidad a la altura del Instituto Nacional de Salud Pública, y que tenía seis meses de haber salido de la cárcel donde estuvo purgando una condena por el delito de robo de vehículos.
Diariamente, pistoleros a sueldo que se mueven en motocicletas se encargan de eliminar a “los contras”—como les denominan ellos a los que también se dedican al narcomenudeo— consientes de que habrá una reacción.
Cuando se atraviesan policías los acribillan, como ocurrió el pasado 20 de noviembre, que se registró un enfrentamiento entre presuntos delincuentes y elementos de la Secretaría de Protección y Auxilio Ciudadano, dejando un saldo de nueve muertos y varios lesionados. Dos de los fallecidos eran policías que murieron en cumplimiento de su deber.
Obviamente, ese tipo de noticias acapara las portadas de los medios impresos y portales de internet, y las noticias positivas (270 millones de pesos en obras para este año, por ejemplo) pasan desapercibidas.
Y esto ocurre —insistimos— en todos los municipios de Morelos, y en todos los estados de la República (algunos están peor), de tal manera que ningún partido político puede criticar a un gobierno estatal o municipal, pues siempre habrá un alcalde o gobernador suyo que atraviesa por el mismo problema.
En conclusión, la delincuencia agarra parejo sin importarles colores ni siglas, y contra esas acciones no hay presupuesto de Comunicación Social que alcance para contrarrestarlo.
HASTA EL LUNES.