Los últimos acontecimientos ocurridos en el territorio morelense, a horas de que se realice la votación para elegir gobernadora, presidentes municipales y diputados (independientemente de los cargos que estarán en juego a nivel nacional), parece ser el preludio de las elecciones más violentas en la historia de Morelos. Ojalá que nos equivoquemos.
El pasado martes, el suplente del candidato a la alcaldía de Cuautla, por la coalición del PRI, PAN, PRD y RSP, Ricardo Arizmendi fue asesinado. Los policías recibieron un reporte de que, aproximadamente a las 16:30 horas, hubo un ataque armado en una tienda de abarrotes en la Plaza 12 de Octubre, por el cual reportaban dos personas heridas.
Tras el llamado de auxilio, policías y cuerpos de emergencia arribaron al sitio y localizaron a un hombre y a una mujer, quienes se encontraban lesionados por varios disparos de arma de fuego. En el lugar de los hechos, paramédicos de la Cruz Roja brindaron los primeros auxilios a las víctimas; sin embargo, informaron que el hombre ya no contaba con signos vitales. En tanto, la mujer tenía disparos de arma de fuego en el pecho, por lo que fue trasladada de inmediato a un hospital para su atención médica.
En el sitio, testigos manifestaron que una persona (unos aseguran que era una mujer) descendió de una motocicleta e ingresó al negocio con razón social "Arizmendi" y disparó en contra de las víctimas para luego salir y subir a la motocicleta y huir del sitio.
Ricardo Arizmendi era abogado, pero principalmente comerciante. Hace tres años fue candidato del Partido Fuerza por México a la alcaldía de Cuautla y en esta ocasión la coalición Dignidad y Seguridad por Morelos, Vamos Todos, lo postuló como suplente de Jesús Corona Damián, quien ocupó el cargo en el periodo 2019-2021.
El propio Corona Damián aseguró haber sufrido un atentado hace unas semanas, cuando sujetos armados le dispararon a su camioneta blindada, resultando ileso. Irónicamente, tanto el atentado fallido como el asesinato de su suplente, le sirvió para atraer reflectores en los medios de comunicación, en una competencia en la que el candidato morenista Rodrigo Arredondo lleva una ventaja irreversible.
Un día después, el ayudante municipal de la colonia Miguel Hidalgo del municipio de Xochitepec, Fredy Méndez, fue ultimado a las afueras de su domicilio con todas las características típicas de una ejecución.
Ni tardo ni perezoso, el candidato del Partido del Trabajo a la presidencia municipal de esa localidad, Rodolfo Tapia López (quien ya ocupó una vez el cargo de alcalde), se trasladó al zócalo de Cuernavaca y dio una conferencia de prensa en el restaurante Los Arcos, en la que responsabilizó de esa muerte al actual edil, Gonzalo Flores, pues el hoy occiso “recientemente se había adherido a este proyecto”.
Casualmente, este ex alcalde también sufrió un atentado en el que resultó ileso y el vehículo afectado es un carro viejo. Desde entonces evita los eventos multitudinarios y su campaña se limita a mensajes por Facebook.
El tercer caso que habremos de abordar es el que ocurrió en el municipio de Tlaltizapán, donde unos compañeros periodistas fueron detenidos por elementos de la Policía Vial de ese lugar que dependen directamente del alcalde morenista, y candidato a la reelección ahora por el Partido Nueva Alianza, Gabriel Moreno Bruno.
Eusebio Cortés, reportero de Interdiario de Cuautla, fue detenido la tarde del miércoles por elementos de la Policía Municipal bajo el delito de “distribuir el periódico impreso con información de la candidata del Partido Verde Ecologista a la presidencia, Nancy Gómez Flores”.
El reportero fue seguido primero por un grupo de motociclistas y después detenido por elementos de la policía y tránsito municipal bajo el argumento de que los vecinos los habían reportado por estar “tirando basura”.
De acuerdo con la información de la periodista Perla Aguilar, quien acudió en auxilio de los colegas, iban a ser tres multas: una por tirar basura, otra por falta de licencia y otra por traer la tarjeta de circulación vencida. Primero le informaron que tenían que pagar mil 085 por infracción, luego que mil 629 por las tres, y al final simplemente los dejaron salir.
El Ayuntamiento de Tlaltizapán emitió un comunicado contradictorio, donde primero dice que fueron detenidos a petición de unos vecinos por estar “tirando basura”, y al final informa que se iniciará un proceso por parte de Asuntos Internos en contra de los policías.
Nuevamente se demostró que el gremio periodístico es unido cuando alguien está en problemas, aunque después nos sigamos haciendo pedazos en las redes sociales.
Finalmente, hacemos notar una situación muy alarmante de lo que está sucediendo en Cuautla.
De acuerdo con un recuento publicado por el periódico Interdiario de Luis Pablo Carrillo, con el asesinato de Ricardo Arizmendi Reynoso, suman al menos cinco los políticos y líderes sociales ejecutados en este último trienio en el municipio.
El primer crimen de alto impacto ocurrió con Carlos Bildmart, ex candidato del PSD a la presidencia municipal, victimado en la Avenida Reforma frente a una escuela de inglés.
A esto se sumó posteriormente el asesinato de Giovanni Lezama Barrera, regidor del Partido Acción Nacional, quien fue atacado a tiros en un gimnasio en el centro de Cuautla.
Giovanni Lezama se perfilaba para ser candidato a diputado local por la alianza PAN, PRI, PRD y RSP, candidatura que ostenta hoy su papá Gustavo Lezama Rodríguez.
Otro crimen de alto impacto fue el de Juan Carlos Fitz, ayudante municipal de la colonia Morelos, quien por la mañana del día de su asesinato había hecho duras críticas a la administración municipal de Cuautla que encabeza Luis Rodrigo Arredondo López.
La criminalidad continuó con la ejecución de Darío Cortés García, quien era el coordinador de los camiones que transportaban caña de azúcar del ingenio Casasano de la organización que encabeza Miguel Barranco García, quien es actualmente regidor y va por la reelección ahora por el partido Morena.
A la lista de lideres sociales se sumó el asesinato de Alberto Andrade Flores, secretario general de la Unión de Comerciantes del mercado Hermenegildo Galeana Organización adherida al sector popular del PRO M(CNOP). El homicidio de Alberto Andrade ocurrió dentro de las instalaciones del mismo mercado.
La lista culmina con Antolín Castro Castellanos, ex dirigente de la Unión de Tablajeros de Cuautla, ultimado en su carnicería cuando se desempeñaba como secretario general de comerciantes unidos del mercado Hermenegildo Galeana.
La pregunta es ¿quién sigue?
HASTA MAÑANA.