Además de ser el método de elección para los diferentes cargos, los comicios del pasado domingo dos de junio sirvió para que los partidos políticos pudieran evaluarse y tomar las decisiones que consideren convenientes. Morena es el líder, seguido del PAN, Movimiento Ciudadano y Partido del Trabajo. La sorpresa fue el Verde, y las decepciones fueron el PRI, el PRD y el MAS. Del PES ya ni hablamos.
El hecho de que la candidata de Morena, Margarita González Saravia, haya ganado la elección para la Gubernatura, las Senadurías y los cinco distritos federales, deja en segundo término cualquier crítica a la forma de seleccionar a sus candidatos a diputados locales y presidentes municipales.
Algunos analistas esperaban que la distancia entre Margarita y Lucy fuera menor, incluso se hablaba de un empate técnico, teoría que se desvaneció el día de las votaciones. No obstante, los propios dirigentes de la coalición Dignidad y Seguridad por Morelos, Vamos Todos, admiten que si la senadora no se hubiera salido de Morena para hacer una alianza con el PRI, PAN y PRD, esos partidos no tenían a nadie que le hiciera frente a la candidata morenista. Hubieran terminado postulando a Mayela Alemán, lo cual sería desastroso en términos de resultados electorales.
Ahora bien, ¿a qué partidos les fue mal y muy mal en las elecciones de junio pasado? Consideramos que al Partido de la Revolución Democrática (PRD), que es un partido que, después de gobernar esta entidad federativa hace apenas 5 años, prácticamente desapareció de la faz de la tierra. Recordemos que ya había perdido el registro a nivel estatal y participó esta vez con las siglas del partido nacional.
Aunque andan tratando de encontrar votos debajo de las piedras, y que vimos a un optimista Sergio Prado Alemán confiado en que lograrán conseguir el tres por ciento de los votos, ya no hay nada de aquel PRD que llevó a la Gubernatura a Graco Ramírez Garrido y que gastó una millonada tratando de mantenerse en el poder con Rodrigo Gayosso.
El que aún respira es el Partido Revolucionario Institucional (PRI) que regentea en Morelos Eliasib Polanco y Jonathan Márquez. Vergonzosamente, Jonathan impugnó la designación de su compañera de partido (una jovencita proveniente de la zona sur de nombre Gonzala Martínez), porque a fuerza quiere quedarse con la única posición plurinominal para la que les alcanzó sus 33 mil votos.
El PAN de los hermanos Terrazas están contentos con sus casi 100 mil votos en todo el estado, tan es así que Daniel Martínez Terrazas se dio el lujo de elegir entre la posición obtenida mediante el voto directo o el espacio plurinominal que ya había apartado, y que terminó cediéndoselo a Gerardo Abarca, quien más que panista es “Uriosteguista”.
Al partido que todo le salió fue al Verde, que consiguió una diputación plurinominal y varias presidencias municipales con candidatos que despreció Morena. A saber: Emiliano Zapata, Tlaltizapán, Jonacatepec, Jantetelco y Temoac. En Cuernavaca, su candidato Joaquín Carpintero logró 7 mil 264 votos que sirvieron para que Miguel Serrano sea regidor otra vez.
La que está muy contenta es la lideresa del Partido del Trabajo (PT), Tania Valentina Rodríguez, ya que su partido obtuvo más del diez por ciento de la votación total en el estado, las presidencias municipales de Amacuzac, Totolapan y Zacualpan de Amilpas; regidurías en 15 Ayuntamientos y, lo más importante, su diputación plurinominal como afrodescendiente. Lo más increíble es que no se avizora a nadie que le haga sombra a esta mujer que ya va por su tercer periodo consecutivo como legisladora, y quién sabe cuántos años como dirigente del PT.
Al partido Nueva Alianza también le fue muy bien. Aunque perdió en Tlaltizapán donde les tocó “siglar” al detestable Gabriel Moreno Bruno, la familia Alonso y parte del Sindicato de Maestros lograron juntar más de 30 mil votos que les alcanza perfectamente para meter una posición plurinominal. Desgraciadamente no se le hizo al presidente del partido, Mario Luis Salgado, quien tuvo que dejarle el lugar a una profesora desconocida que “se sacó la lotería”. Por ahí en Mazatepec se ganó la presidencia municipal, pero esa ni la tomen en cuenta. Es un empresario que compró la candidatura y ganó, pero no tiene nada que ver con el magisterio.
Por cuanto al partido creado por Matías Nazario y manejado por el abogado Enrique Paredes, ahora sí que “esperábamos más del MAS”. Movimiento Alternativa Social sólo ganó una presidencia municipal, y esa fue porque Morena se equivocó rotundamente al postular a la impopular Keyla Figueroa cuando todos les decían que el efectivo era José Luis Maya. Al final, ya no había otro partido más que el MAS y el actual alcalde se tuvo que registrar por ese partido para buscar su reelección.
Movimiento Ciudadano es otro que no mejoró, pero se mantiene en el ánimo de los electores, buscando siempre a los líderes sociales que sean rentables como candidatos. Ganó las presidencias de Tlayacapan (volvió a perder “el niño de Tlayacapan”), Tetela del Volcán (volvió a perder el abogado Rubicel) y Axochiapan, y tiene derecho a una diputación plurinominal que ya pagó la diputada Luz Dary para quedarse otros tres años. Ahí la llevan.
En varios municipios estuvieron cerca de ganar (Tepoztlán por ejemplo), y en Jiutepec Patricia Martínez se puso abusada y compitió por la presidencia municipal pero apartó la primera regiduría, donde ya estuvo hace unos años. Myredd Mariscal logró 20 mil 548 votos, suficientes para que la abogada Erika Lastra llegara a la octava Regiduría.
Seguimos con Redes Sociales Progresistas, un partido que se vio favorecido con los que queríamos votar por José Luis Urióstegui pero no queremos al PAN, ni al PRD y menos al PRI, entonces nos fuimos con RSP y sacaron tres mil votos. Los más de 10 mil votos no alcanzaron para que la señora Claudia Huitrón Vázquez se convirtiera en diputada plurinominal.
Finalmente (y sólo por no dejarlos de mencionar), tenemos a dos partidos que consideramos nunca debieron haber existido porque son resultado del engaño y la conveniencia. Nos referimos al partido Morelos Progresa, que conformaron todos los diputados que estuvieron en la LVIII Legislatura, y que lo crearon con el dinero que les pagó Rodrigo Gayosso por votar todo lo que él y su padrastro propusieran sin chistar. Afortunadamente todos sus candidatos perdieron.
El Partido Encuentro Social (o Solidario) que creo el nefasto Hugo Erick Flores, que supuestamente está conformado por organizaciones cristianas, pero que se ha ofrecido al mejor postor y en esta ocasión logró convencer a Morena de ir en coalición. Logró apenas 12 mil 700 votos que no les alcanzó para que Marco Antonio Martínez Dorantes fuera diputado plurinominal.
Y si bien es cierto que ganaron el municipio de Tlalnepantla, todo mundo sabe que fue de rebote, y que el candidato ganador (un abogado de nombre Jorge Armando Genaro Rubio) no tiene nada que ver con ese partido.
HASTA MAÑANA.