Al leer esa información me siento orgulloso de los notables cambios que se han dado en Morelos en lo que tiene que ver con el acercamiento a la ciencia.
Por supuesto, es enorme lo que hace falta por hacer, pero es enorme también la diferencia entre lo que se hace hoy y lo de hace poco más e un lustro.
Ha sido un esfuerzo colectivo lo mismo de científicos e ingenieros que de profesores de secundaria y bachillerato, así como de algunos directivos de la enseñanza tanto pública como privada que ponen su mejor esfuerzo para incentivar la participación de niños y jóvenes que, muchas veces por ese solo hecho, cambiarán sus vidas, pues han visto nuevos caminos profesionales, distintos a las clásicas y saturadas carreras “sin matemáticas”.
Desde aquí envío una calorosa felicitación a quienes tanto han hecho por esa causa y que han conseguido logros extraordinarios no sólo a nivel nacional, sino internacional.
Ojalá que los políticos que resulten ganadores del próximo proceso electoral reconozcan también este esfuerzo y lo apoyen para seguir formando a mejores ciudadanos y a quienes serán exitosos profesionistas en campos que tanto reclama el país.