Hoy comentaremos al respecto del virus del Zika, basándonos en la declaración de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) acerca de su transmisión y prevención, con información actualizada al 28 de enero pasado.
El Zika es un virus transmitido por mosquitos, nuevo para las Américas. Desde que Brasil informó respecto a los primeros casos de transmisión local del virus, en mayo de 2015, el zika se ha extendido a 21 países y territorios en la zona, según la información actualizada al 23 de enero: Barbados, Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Guadalupe, Guyana, Guyana Francesa, Haití, Honduras, Martinica, Panamá, Paraguay, Puerto Rico, República Dominicana, Saint Martin, Surinam, Venezuela y México.
La llegada del virus a algunos países de las Américas, en particular a Brasil, se ha asociado a un aumento del número de recién nacidos con microcefalia y de casos de síndrome de Guillain-Barré, una afección en la que el sistema inmunitario ataca el sistema nervioso y llega a producir parálisis, en algunos casos.
Cabe agregar que aunque todavía no se ha establecido una relación causal entre el virus de Zika y las malformaciones congénitas y síndromes neurológicos, hay fuertes motivos para sospechar su existencia.
El virus se identificó por vez primera en Uganda, en los bosques de Zika en el año de 1947, en macacos de la India y a través de una red de monitoreo de la fiebre amarilla selvática.
Tras la picadura del mosquito, los síntomas de la enfermedad aparecen generalmente después de un periodo de incubación de tres a doce días; la infección puede cursar de forma asintomática, o presentarse con una clínica moderada.
En los casos con enfermedad moderada, los síntomas incluyen: fiebre, conjuntivitis no purulenta, cefalea, mialgia y artralgia, astenia, edema en miembros inferiores, y, menos frecuentemente, vómito, diarrea o dolor abdominal; los síntomas duran de cuatro a siete días.
Hay dos razones principales para que el virus se propague rápidamente: la primera es que la población de las Américas no había estado expuesta anteriormente al Zika, y por lo tanto carece de inmunidad; la segunda es que el mosquito Aedes, que es el principal vector para la transmisión del Zika, está presente en todos los países de la región, exceptuando Canadá y Chile continental.
La OPS también prevé que el virus del Zika continuará extendiéndose y probablemente llegará a todos los países y territorios de la región donde se encuentra el mosquito Aedes.
Algunas de las formas más eficaces de prevención son las siguientes: reducir las poblaciones de mosquitos, eliminando potenciales criaderos, especialmente los envases y otros artículos que pueden acumular agua, además del uso de larvicidas para tratar las aguas estancadas; de la misma manera, utilizar medidas de protección personal para evitar las picaduras de los mosquitos.
La evidencia sobre la transmisión de madre a hijo del Zika durante el embarazo o el parto es limitada; la investigación está en curso para generar más pruebas con respecto a la transmisión perinatal, y para comprender mejor cómo el virus afecta a los bebés; actualmente tampoco existe evidencia de que el Zika se pueda transmitir a los bebés a través de la leche materna.
La OPS también trabaja con los países miembros para fortalecer la lucha contra el vector, comunicar los riesgos del Zika y promover la prevención, además de establecer o mejorar la vigilancia de las infecciones por el virus y las presuntas complicaciones, como la microcefalia, el síndrome de Guillain-Barré y otros trastornos autoinmunes y neurológicos.
Por su parte, la directora de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Margaret Chan, convocará un Comité de Emergencia del Reglamento Sanitario Internacional sobre el virus de Zika y el aumento de los trastornos neurológicos y las malformaciones congénitas, que se reunirá el lunes 1 de febrero en Ginebra para determinar si el brote constituye una emergencia de salud pública de importancia internacional.
En Morelos, la secretaria de Salud, Patricia Mora González, informó en días pasados que se descartó que el virus Zika haya llegado a nuestro estado, luego de practicar estudios de laboratorio a un paciente cuyo cuadro sintomatológico hacía sospechar que se trataba de esa enfermedad; también indicó que ya se trabaja para garantizar que el personal cuente con la capacitación que le permita un diagnóstico certero y oportuno para actuar, si se requiere, y así evitar la propagación de esta enfermedad.