Quienes se autonombran “cuadros distinguidos” creen que pueden aspirar al cargo hoy ocupado por Marco Antonio Adame Castillo. Así, son muchos los que han “levantado la mano” expresando: “¡Aquí estoy! ¡Yo soy el bueno!”. Empero, lo anterior definitivamente forma parte de estrategias particulares, tendientes a apuntar hacia la cúspide dentro de un partido político que se asemeja a cualquier agencia de colocaciones, a fin de conseguir chamba durante los próximos años so pretexto de la elección concurrente de 2012.

Mucha pericia política, pues, habrán de demostrar a la militancia tricolor el flamante delegado regional de la Zona Centro del PRI, René Juárez Cisneros (ex gobernador de Guerrero), y el delegado especial del Comité Ejecutivo Nacional del mismo instituto político, Emilio Andrés Mendoza Kaplan (actual diputado federal por Oaxaca). Lo deseable es que no vayan a abusar de la hospitalidad local, de los cuantiosos recursos públicos manejados por el CDE del PRI, de nuestro magnífico clima y de la impresionante tolerancia de las bases territoriales. Ojalá y borren el antiguo estigma que pesa sobre la estructura general del Revolucionario Institucional en esta entidad, bajo el siguiente tenor: “Morelos no significa nada para el candidato presidencial, pues no le representa un importante número de votos”. Este desprecio, identificado desde hace décadas por muchos personajes que se dieron cita ayer en el auditorio del Sindicato Nacional de Trabajadores Petroquímicos (sito en Jiutepec) para atestiguar la instalación del Consejo Político Estatal, propició el divisionismo y la proliferación de politiqueros que sólo le apuestan al beneficio personal. Estas son las causas por las cuales abundan los aspirantes a la gubernatura que observan en el 2012 su última oportunidad de vida y consolidación económica.

Dichos emisarios del CEN del PRI, si fueron observadores, pudieron percibir en el auditorio de los Petroquímicos una grave contradicción. En el marco de la instalación y primera sesión ordinaria del Consejo Político Estatal del PRI, el dirigente estatal, Amado Orihuela Trejo, convocó al priismo a trabajar con humildad, “pero sobre todo cohesionados, pues la unidad hará invencible al PRI en el 2012”. Sin embargo, el recinto estuvo enmarcado por cinco grandes fotografías del propio diputado local, ponderando la reciente elección de 907 comités seccionales y plasmando la principal frase proselitista del ex alcalde de Miacatlán: “Rescatemos Morelos”, la cual repitió ayer durante su discurso y ante cientos de priístas que se mueven demasiado con la emoción. Nadie en su sano juicio pasó inadvertido el oportunismo implícito, condición que podría modificarse si Orihuela Trejo renunciara hoy mismo a su privilegiada posición. Su proyecto se tornaría legítimo y contribuiría a la anhelada unidad tricolor.

Algo quedó patente en el evento de ayer: son dos los principales aspirantes a la candidatura gubernamental priísta. Me refiero al multicitado Amado Orihuela y a Manuel Martínez Garrigós, presidente municipal de Cuernavaca. Sólo entre ambos pudimos notar la intensidad del aplausómetro, no obstante que en la primera fila, frente al presídium, se encontraban el ex gobernador sustituto Jorge Morales Barud y el ex diputado federal Jorge Meade Ocaranza, quienes tienen el mismo anhelo. Empero, ninguno de los dos despertó la pasión de los 907 presidentes de comités seccionales y 650 nuevos miembros del Consejo Político Estatal que se encontraban presentes.

Cabe subrayar que el diputado local “priísta” Fernando Martínez Cué llegó tarde (alrededor de las 11:30 horas), no obstante que también ha levantado la mano (a pesar de su ilegitimidad, de lo cual comenté ayer). Me llamó la atención la presencia de Víctor Samuel Palma César, líder estatal de la CNOP, otro aspirante a la candidatura gubernamental, debido a un factor: quien se le acerca lo trata con evidente respeto. Sin embargo, este no es su momento: no le favorecen las encuestas, lo cual sí sucede con Martínez Garrigós y Orihuela (en ese orden y con notoria diferencia). Concurrieron solamente los diputados federales Jaime Sánchez Vélez y José Manuel Agüero Tovar, no así Félix Rodríguez Sosa y Rosalina Mazari Espín, quienes enviaron representantes.

La sesión del Consejo Político Estatal avaló la consulta abierta a la ciudadanía como el método para elegir al candidato presidencial. Este fue el único punto agendado, a fin de cumplir con la legislación electoral federal. En tal escenario, Manuel Martínez Garrigós se pronunció por la aplicación del mismo procedimiento para la elección del candidato a la gubernatura. Así propinó un mentís -en lo que a él concierne- al principal elemento impugnativo que enarbolan Marisela Sánchez Cortés y Guillermo del Valle Reyes (este último repartió ayer discos compactos y otro tipo de propaganda en la avenida Plan de Ayala de Cuernavaca), respecto a que “habrá una imposición desde el Comité Ejecutivo Nacional”. Y aunque no rechazó que la consulta abierta pudiera ser un mecanismo de elección, Amado Orihuela –por su parte- pidió prudencia, “ya que es facultad del Consejo Político determinar el método”. Lamentablemente, existen algunos personeros que se mueven como cortesanos, a la antigua, en las élites, menospreciando a la gente. ¿Es real la posibilidad de una imposición? No me cabe la menor duda. Esperemos para ver y después diremos.